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Título: Confesión o Condenación
Autor: R. P. José María Vilaseca, M. J., Siervo de Dios (1831-1910)
Herrero Hermanos, Editores; 11 Edición; México, 1903
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Presentación en formato gráfico.
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[3] Prólogo
[4] Capítulo Primero. Se prueba por la Escritura la necesidad de confesarse
[4] 1. ¿A quién dará Dios la gloria?
[5] 2. David, Nemías y Tobías confesando sus pecados
[6] 3. Los Israelitas, Daniel, sus compañeros y los Macabeos confesando sus pecados
[7] 4. Adán y Eva, Caín y Faraón, Saúl y Judas confesando malamente sus pecados
[5] 5. Jesucristo instituyendo la confesión, o sea el sacramento de la penitencia
[11] Capítulo II. Se demuestra por la tradición la necesidad de confesarse
[11] 6. Conducta necia y culpable de los protestantes
[15] 7. Práctica de la confesión en Jesucristo y sus apóstoles
[17] 8. Práctica de la confesión desde el tiempo apóstólico hasta el de Inocencio III
[20] 9. El Concilio de Trento y la Confesión
[23] Capítulo III. Práctica de la confesión por las utilidades que nos reporta
[23] 10. ¿Quiénes son los protestantes?
[24] 11. La confesión reconcilia al hombre con Dios
[25] 12. La confesión reconcilia al hombre consigo mismo
[26] 13. La confesión lo establece en un estado de paz (al hombre)
[27] 14. La confesión nos libra del infierno
[29] Capítulo IV. Práctica de la confesión por las utilidades generales que convienen a todo el género humano
[29] 15. Quiénes debieran considerar los efectos de la confesión
[30] 16. La confesión detiene la nefanda corriente de la impureza y del robo
[31] 17. Los protestantes y la confesión
[34] 18. Facilidad de la confesión
[38] Capítulo V. Desgracias que caerán sobre el que no se confiesa
[38] 19. O confesión o condenación
[39] 20. Primera desgracia contra el que no se confiesa: Dios comienza a abandonarlo
[40] 21. Segunda desgracia: Dios le niega la providencia especial que tenía de él
[41] 22. Tercera desgracia: Dios permite que caiga sobre él la ceguedad del entendimiento
[42] 23. Cuarta desgracia: Dios lo entrega al poder del demonio
[44] 24. Quinta desgracia: Dios le quita su divina ayuda
[47] Capítulo VI. Debo confesarme ahora, porque el número de mis pecados está marcado
[47] 25. O confesión o condenación
[48] 26. El número de los pecados está marcado
[50] 27. La misma verdad en la práctica
[52] 28. Cómo murió un avaro
[54] Capítulo VII. Debo confesarme ahora, porque este llamamiento es tal vez la última gracia
[54] 29. O confesión o condenación
[55] 30. Está determinado el número de las gracias que Dios ha de concederte
[57] 31. La misma verdad prácticamente
[59] 32. Cómo murió un deshonesto
[61] Capítulo VIII. Debo confesarme, so pena de quedar abandonado de Dios
[61] 33. Sentencia de San Juan
[62] 34. Desamparo del alma
[64] 35. Cómo queda el alma desamparada de Dios
[66] 36. Imposibilidad de salvarse
[67] 37. ¿Puede caer un católico en la imposibilidad de salvarse?
[69] 38. Medios para librarse de tan grande mal
[72] Capítulo IX. Son pocos los que se salvan, porque son pocos los que se confiesan
[72] 39. Carácter de Jesucristo
[74] 40. Corto número de los escogidos
[76] 41. ¿Por qué no se salvaron los condenados?
[77] 42. ¿Por qué no se salvaron los antidiluvianos?
[79] 43. Si tú te pierdes, lector carísimo, ¿por qué te condenarás?
[81] Capítulo X. Castigos que caerán sobre los que no se quieren confesar
[81] 44. Fundamento de los castigos de Dios
[82] 45. Justa queja de Dios, contra los que no se confiesan no obstante las instancias que se les hacen
[85] 46. Respuesta de los sacerdotes ministros de Dios
[87] 47. Castigos corporales
[89] 48. Castigos espirituales
[91] Capítulo XI. Cargos y maldiciones contra los obstinados que no se confiesan
[91] 49. Justos juicios de Dios
[92] 50. Cargos por la palabra de Dios
[94] 51. Cargos por los lugares en que no se predica
[96] 52. Cargo de los pecadores convertidos
[98] 53. Maldiciones contra los obstinados que no se confiesan porque no quieren
[101] Capítulo XII. Cinco medios para recibir bien el Sacramento de la Penitencia
[101] 54. Recopilación
[102] 55. Efectos de la confesión en el rey Manasés
[104] 56. La penitencia como virtud y como sacramento -dice 66 en el libro-
[105] 57. Cinco cosas necesarias para recibir el sacramento de la penitencia -dice 67 en el libro-
[105] 1. ¿Qué cosa es examen?
[106] 2. Dolor
[106] 3. Propósito
[106] 4. Confesión
[107] 5. Satisfacción
[108] Capítulo XIII. Examen de conciencia
[108] 58. Utilidad y necesidad de examinar la conciencia
[110] 59. Qué es examen y su objeto
[111] 1. De todos los pecados mortales
[114] 2. El examen debe hacerse cargo de cada uno de los pecados mortales
[114] 3. El examen debe hacerse cargo de los pecados más ocultos
[114] 4. El examen debe hacerse cargo de los pecados de pensamiento
[115] 5. El examen debe hacerse cargo de las circunstancias que mudan la especia del pecado
[116] 60. Virtudes del examen
[118] 61. Medios para hacer bien el examen
[122] Capítulo XIV. Examen práctico de conciencia y su compendio
[122] 62. Causas de este examen
[123] 63. Petición de la gracia y división de la vida
[125] 64. Examen del primer mandamiento
[127] 65. Examen del segundo mandamiento
[129] 66. Examen del tercer mandamiento
[131] 67. Examen del cuarto mandamiento
[134] 68. Continuación del examen del cuarto mandamiento
[139] 69. Examen del quinto mandamiento
[140] 70. examen del sexto y nono mandamiento
[143] 71. Examen del séptimo (y décimo) mandamiento
[145] 72. Examen del octavo mandamiento
[147] Capítulo XV. Compendio de todo el examen
[147] 73. Compendio de todo el examen práctico y preámbulo a la confesión
[148] Capítulo XVI. Sobre las obligaciones especiales
[148] 74. Examen de las obligaciones particulares
[148] 1. Autoridades civiles
[149] 2. Jueces
[149] 3. Abogados y procuradores
[149] 4. Escribanos (Notarios)
[149] 5. Médicos, cirujanos y boticarios (farmacéuticos)
[150] 6. Tutores, curadores, albaceas y administradores
[150] 7. Comerciantes
[150] 8. Militares
[150] 9. Sacerdotes, confesores, predicadores y curas
[151] Capítulo XVII. Examen para personas que frecuentan los santos sacramentos, o que están consagradas a Dios por medio de los santos votos
[153] 75. Examen práctico. De las personas que frecuentan los santos sacramentos
[153] Faltas contra Dios
[153] Contra el prójimo
[153] Contra ti mismo
[154] Sobre los votos, reglas, cosas pequeñas y su perfección
[155] Capítulo XVIII. De la contrición del corazón
[155] 76. Necesidad del dolor
[158] 77. Qué cosa es dolor, y sus especies
[159] 78. Condiciones que deben acompañar el dolor
[160] 79. El dolor debe ser sumo
[161] 80. El dolor debe ser sobrenatural
[162] 81. El dolor debe ser universal
[163] 82. Meditando se adquiere el dolor
[165] 83. Orando se adquiere el dolor
[166] Capítulo XIX. Del propósito firme de la enmienda
[166] 84. Motivos y razones que demuestran la necesidad del propósito
[169] 85. Qué es propósito
[170] 86. El propósito debe ser universal y perpetuo
[171] 87. El propósito debe ser eficaz
[172] 88. El propósito debe ser firme
[174] 89. Medios de alcanzarlo y señales para conocerlo
[176] Capítulo XX. Práctica de la confesión: lo que no debe decirse y las cosas que no deben confesarse
[176] 90. Tribunal de la penitencia
[177] 91. Qué cosas deben evitarse en la confesión
[181] 92. Cómo no deben confesarse virtudes y confesiones
[182] 93. No deben confesarse las necesidades y frecuentes dudas
[184] 94. Cómo no deben confesarse ofensas, defensas y disimulos
[187] 95. Quiénes se confiesan mal, y avisos para confesarse bien
[192] Capítulo XXI. Poderosos motivos para no callar pecados en la confesión
[192] 96. Sentencia de Santa Teresa de Jesús
[193] 97. Primera razón de parte de Dios
[194] 98. Segunda razón de parte del demonio
[195] 99. Tercera razón de parte de la culpa
[196] 100. Cuarta razón de parte del confesor
[197] 1. Las noticias que ya tiene
[198] 2. El sigilo
[198] 3. La especie de autoridad que ejerce
[198] 101. Quinta razón de parte de la misma alma
[199] 102. Sexta razón de parte de la corona de la gloria
[200] 103. Han de decirse los pecados como están en la conciencia
[202] 104. Circunstancias de los pecados
[202] 1. ¿Quién?
[202] 2. ¿Qué?
[202] 3. ¿En dónde?
[203] 4. ¿De qué medios?
[203] 5. ¿Por qué?
[203] 6. ¿Cómo?
[203] 7. ¿Cuándo?
[204] Capítulo XXII. Sobre la Confesión General
[204] 105. El por qué de la confesión general
[205] 106. Necesidad de hacer confesión general
[206] 107. Los Santos haciendo confesión general y exhortándola
[208] 108. Dificultades contra la confesión general
[209] 109. Medios para hacerla bien
[211] Avisos para hacer con acierto la elección de estado
[213] Consideraciones eficacísimas para excitarse el pecador a contrición, sacadas del «Tratado de la confesión general» por el R. P. Vicente Ferrer, de la congregación de la Misión
[216] Acto de contrición
[220] Protesta
[222] Oraciones para recibir con fruto los Santos Sacramentos de la Penitencia y Eucaristía
[223] Para después de la comunión
[223] Para antes de la comunión
[224] Para después de la comunión
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