Posteado por: B&T | miércoles, octubre 5, 2011

«La Danza del Sol» 94 aniversario (2012) del Milagro de Fátima

Título: «La Danza del Sol» 94 aniversario (2012) del Milagro de Fátima
Autor: Frère Michel de la Sainte Trinité des petits Frères du Sacré-Cœur
Original en inglés: The Dance of the Sun
Extraído del libro «The whole truth about Fatima»; § 3. El milagro del 13 de octubre; cap. 10. La danza del sol; (edición inglesa online); la traducción del original en francés al inglés la realizó John Collorafi
Traducción al español: Alejandro Villarreal -oct. 2011-. Notas añadidas, vídeo añadido (el 12 de ene. de 2012)

Vídeo de una conferencia del Dr. Peter Chojnowski realizada en Brasil, el 20 de agosto de 2007, titulada El Milagro del Sol como Proclamación del Reinado Universal de María, en la cual se resume parte de este escrito del R.P. Michel de la Santa Trinidad. Traducción simultánea al español por Fátima On Demand, que es de donde se tomó este vídeo.

Frère Michel de la Sainte Trinité des petits Frères du Sacré-Cœur. Considerado uno de los máximos expertos sobre las apariciones de Fátima y su mensaje.

He aquí los hechos, brevemente desplegados por un periodista del que nadie podría sospechar o acusar de imparcialidad en este asunto, ¡y con razón! El hombre en cuestión es Avelino de Almeida, editor en jefe de O Seculo, el gran diario “liberal”, anticlerical y masónico de Lisboa:

«Desde la carretera, donde los coches quedaron estacionados y varios cientos de personas permanecieron, no teniendo el coraje de avanzar hacia el campo lodoso, uno podía observar a la inmensa multitud mirando hacia el sol, el cual apareció en su zenit, abriéndose paso entre las nubes

«Parecía un disco plateado sin adornos, y era posible fijar la mirada en éste sin el menor daño. No quemaba los ojos, no los cegaba, uno podría decir que estaba ocurriendo un eclipse.

«Un inmenso clamor se levantó, y aquellos quienes estaban más cerca de la multitud les escucharon decir: “¡Milagro!, ¡prodigio!… ¡prodigio! …”

«La actitud de la gente nos transportó a los tiempos bíblicos, estupefactos y con las cabezas descubiertas miraron a los cielos. Ante sus deslumbrados ojos el sol temblaba, el sol realizó movimientos inusuales y bruscos, desafiando todas las leyes del cosmos, y según la típica expresión de los campesinos, “el sol danzó”…» [1]

Enérgicamente confrontado por toda la prensa anticlerical, Avelino de Almeida renovó su testimonio quince días después en su reporte en Illustraçao Portuguesa. Esta vez, él ilustró su relato con una docena de fotografías de la inmensa multitud, que estaba extasiada, y en todo su artículo repitió, como si fuese estribillo: «yo lo vi… yo lo vi… yo lo vi»

Citemos su conclusión:

«¿Qué es lo que vi en Fátima que fue tan extraño? La lluvia, a una hora anunciada por adelantado, cesó de caer; la gruesa capa de nubes se disolvió; y el sol, un disco raso de plata, se dejó ver en su zenit, y comenzó a danzar en un movimiento violento y convulsivo, lo cual fue comparado por un gran número de testigos como la danza de una serpentina, debido a los colores que el sol tomaba en su superficie, tan bellos y brillantes.»

Y nuestro reportero concluye, muy apropiadamente:

«¿Milagro?, ¿cómo la gente vociferó?, ¿un fenómeno natural?, ¿como los estudiosos podrían argumentar? Por el momento no me molesto en definirlo, sino sólo en afirmar lo que vi… El resto es materia entre la ciencia y la Iglesia.»

Contenido:

Primero historia, luego ciencia y finalmente Fe.

Esta conclusión de un periodista agnóstico y positivista la podemos hacer nuestra. No es una cuestión de decir, «¡creo en el milagro!» o «¡no creo en éste!». El hecho no pertenecen primero al dominio de la fe, ni a la ciencia incluso. Antes que eso es un acontecimiento histórico que debe ser narrado con gran precisión, inclusive en sus más pequeños detalles. Entonces, y sólo entonces, la ciencia o más precisamente las ciencias racionales pueden considerar los hechos y juzgar su carácter natural o sobrenatural. Y finalmente, después de los resultados del examen científico, la Iglesia debe realizar su pronunciamiento…

Este orden en el análisis de los hechos por el cual uno pasa sucesivamente de la historia a la ciencia, y sólo entonces a la teología y la fe, no puede ser dispensado por nadie sin arriesgarse a confundir todo el proceso. Y esta confusión, que es tan común, fácilmente puede llevarnos a adoptar conclusiones que no corresponden ni a la realidad o los hechos, ni a la interpretación racional, sino sólo a las pasiones subjetivas abordadas con obcecación y a los prejuicios.

IR A CONTENIDO

I. La Historia: un acontecimiento prodigioso y extraordinario.

Es fácil saber lo que sucedió en Cova da Iria el 13 de octubre: Los testigos del acontecimiento fueron innumerables y sus testimonios concuerdan, y los documentos que nos dejaron son más que abundantes. ¿Es necesario un breve resumen histórico?

IR A CONTENIDO

Las fuentes históricas.

La prensa contemporánea portuguesa. Primero que nada, existen numerosos registros testimoniales que aparecieron inmediatamente en la prensa portuguesa. Vale la pena notar que las primeras publicaciones fueron realizadas por los periódicos anticlericales. Los tres artículos de Avelino de Almeida merecen especial mención: el del 13 de octubre, escrito inmediatamente después del evento; el del 15 de octubre, escrito la misma noche en Vila Nova de Ourem, y el del 29 de octubre. A pesar del tono burlón y la ironía volteriana que en parte fueron inspirados por [¿la espontaneidad? (de)] su primer artículo, a pesar de los prejuicios anticlericales que  aparecen en el artículo del día 15, estos textos reflejan al talentoso periodista quien también fue honesto y concienzudo, y son comparables a documentos históricos [2]. Pero él no fue el único en relatar los hechos, y a través de toda nuestra exposición citaremos el testimonio de otros periodistas de Cova da Iria.

IR A CONTENIDO

Las investigaciones oficiales. En noviembre de 1917, a petición de Mons. Vidal, quien fue en ese entonces el director de la diócesis de Lisboa, el sacerdote párroco de Fátima comenzó su investigación e interrogó a muchos testigos de la parroquia. Desafortunadamente él conservó sólo cuatro testimoniales, ¿por qué? Los otros testimoniales, escribió ingenuamente, «no fueron escritos debido a que no agregaban nada a los precedentes». ¡Se concede que es fatigoso escribir varias veces lo que todos repiten! ¡Pero es una lástima desde el punto de vista del historiador! La investigación canónica se llevó a su fin, pero sin incluir la vasta evidencia que se tenía a disposición […]

IR A CONTENIDO

Las investigaciones de los historiadores. Afortunadamente, existían muchos celosos investigadores que subsanaron las negligencias anteriores. Todos los primeros historiadores de Fátima se dirigieron a entrevistar a los testigos. El Padre Formigao obtuvo del Dr. Almeida Garrett, profesor de la Facultad de Ciencias en Coimbra, el testimonio más detallado y más científico de todos los que relatan el evento. El Padre da Fonseca se dedicó a verificar los puntos disputados por el Padre Dhanis [3], luego el Padre de Marchi, el Canónigo Barthas, el Padre Messias Dias Coelho, el Padre Richard, y en 1960 John Haffert, quien recolectó las declaraciones de cuarenta testigos en el libro Meet the Witnesses (Conozca a los testigos) [4]. En 1967, el Padre Martins dos Reis se dedicó completamente a elaborar un libro sobre el fenómeno solar del 13 de octubre [5].

Todas estas investigaciones sucesivas conducidas por los historiadores de Fátima resultaron en la coalición de un impresionante número de testimoniales del evento, los cuales fueron publicados durante la vida de los numerosos testigos, y así, ellos estuvieron en libertad absoluta de publicar cualquier corrección donde fuese necesario.

En 1977, en la conmemoración del 60 aniversario de la última aparición, fue todavía posible reunir en Fátima a más de 30 personas quienes fueron testigos oculares del prodigio solar, y quienes fueron capaces de ofrecer de nuevo su testimonio [6].

IR A CONTENIDO

El reporte de los eventos del 13 de octubre. En lugar de citar sólo unos pocos documentos de gran extensión, se esperaba que pronto casi todos ellos fuesen recolectados en el gran trabajo crítico del Padre Alonso, preferimos utilizar extractos de numerosos registros de testigos para reconstruir con mayor precisión nuestro reporte en la medida de nuestras posibilidades, hora por hora y minuto a minuto, para volver a vivir este día decisivo, el cual es ciertamente uno de los más importantes del siglo XX [7].

IR A CONTENIDO

Esperando el evento.

Viernes 12 de octubre: Los peregrinos se ponen en marcha. Para comenzar, sigamos el reporte de Avelino de Almeida, el cual es particularmente vívido y colorido. Habiendo llegado a la estación del tren de Chao de Macas, el director de O Seculo se encontró con la fastidiosa sorpresa de no encontrar el coche que lo llevaría a Vila Nova de Ourem, donde pasaría la noche. «Ya no había cupo en la diligencia y todos los coches esperaban pasajeros que los habían reservado.» Así que resueltamente se trasladó a pie.

«… En el camino, de Chao de Macas a Vila Nova de Ourem, encontramos a los primeros grupos que ya se dirigían hacia el santo lugar, que se encontraba a casi 21 kilómetros.

«Los hombres y las mujeres iban en su mayor parte a pie, éstas últimas llevaban sus zapatos en bolsas que cargaban sobre la cabeza, mientras que los hombres se apoyaban en varas largas y prudentemente llevaban paraguas. Aparentemente indiferentes a lo que sucedía a su alrededor, ellos no parecían notar la campiña ni a sus colegas viandantes, pero se escuchaba el susurro del Rosario mientras iban inmersos en sus pensamientos.

«Una mujer recitaba la primera parte del Ave María e inmediatamente sus compañeros continuaban la segunda parte en coro. Se movían rápida y rítmicamente con el fin de llegar a su destino hacia el anochecer. Allí, bajo las estrellas pasarían la noche, ocupando los primeros y los mejores lugares cerca del pequeño árbol.

«… Fue gracias al favor de unas personas que fuimos capaces de encontrar alojamiento en Ourem. Durante la noche llegaron a la plaza los más variados tipos de vehículos, trayendo sus cargas de devotos y de curiosos…» [8].

IR A CONTENIDO

Sábado 13 de octubre: Una peregrinación penitencial. Toda la noche llovió, pero como dice el proverbio, «la lluvia matutina no detendrá a los peregrinos». «El súbito cambio en el clima permitió que esta persistente lluvia tornara los polvosos caminos de tierra en pantanos fangosos, por un día se interrumpió el amable clima otoñal para dar paso al más amargo clima invernal. Esto no hizo vacilar a la multitud, ni la hizo rendirse o perder su esperanza.» [9]

«Al alba, los nuevos grupos se apresuraron a cruzar el pueblo y el silencio habitual fue roto por cánticos de las más variadas clases… Cuando el día aclaró, el clima se veía amenazante. Se juntaron nubes negras justo encima de Fátima, pero esto no hizo desistir a la gente, quienes ahora llegaban por todos lados, empleando cualquier medio de transporte. Había lujosos automóviles a motor viajando a toda velocidad, carretas de bueyes a los lados de la carretera, carruajes “victoria”, carruajes cerrados, carros con asientos improvisados y en los cuales ya no podía subirse un alma más.  Todos llevaban comida, tanto para ellos mismos como para sus bestias, las cuales hacían su parte con impavidez.

«Hacia las diez de la mañana el cielo lucía completamente oculto detrás de las nubes y la lluvia comenzaba a arreciar. El fuerte viento golpeaba y limpiaba el agua del rostro de la gente, los peregrinos estaban empapados hasta los huesos, así como el terreno, ni uno ni otro estaban bien protegidos contra el clima. Pero nadie se quejó o emprendió el camino de regreso, aunque algunos buscaron refugio debajo de los árboles y las murallas, la gran mayoría permaneció indiferente hacia la lluvia, continuando su viaje.»

IR A CONTENIDO

En Cova da Iria: Horas de espera… bajo la lluvia.

«El lugar donde supuestamente la Santísima Virgen se ha aparecido, está frente a una gran extensión de la carretera que lleva a Leiria, y donde se encuentran estacionados los vehículos de los peregrinos. Pero la gran mayoría de las personas se congregaron alrededor de un encino, el cual, según los niños [videntes], es el pedestal de Nuestra Señora; se podría imaginar la escena como el centro de un gran círculo formado por los espectadores.

«Visto desde la carretera, el cuadro es pintoresco. Los campesinos, refugiándose debajo de sus paraguas, acompañan la descarga del forraje con el canto de himnos y la recitación un tanto prosaica de las decenas del Rosario. Las personas caminan con dificultad a través del pegajoso barro con el fin de ver al famoso encino de cerca, con sus ramas en forma de arco y sus linternas colgantes…

«Varios grupos se turnan para cantar alabanzas a la Virgen, mientras que aterrorizadas liebres corren entre la multitud y sólo son notadas por unos cuantos chavales, quienes las atrapan y las muelen a palos…» (O Seculo, 15 de octubre; De Machi, p. 130-131).

IR A CONTENIDO

Entre 50,000 y 70,000 testigos.

¿Cuánta gente asistió a Cova da Iria? Es difícil e incluso imposible saber el número exacto, pero la exactitud no importa demasiado, ya que no representa ninguna diferencia, tampoco la realidad del hecho y tampoco la explicación que podemos ofrecer de éste. Es sólo cuestión de aproximarse a la realidad histórica, lo más posible.

Para este propósito, todo lo que podemos hacer es comparar los diferentes estimados, tratar de discernir entre la credibilidad de cada uno de éstos. G. de Sede afirma que los “incensadores” de Fátima son quienes han inflado las cifras de testigos con cada año que pasa [10]. Nada podría ser más falso. El máximo estimado, el del Dr. Almeida Garrett, fue propuesto unos cuantos meses después del evento, el consideró que el número de espectadores rondó en los cien mil. En su artículo publicado en O Seculo, del 15 de octubre, Avelino de Almeida escribió: «esta muchedumbre, la cual fue calculada en su número, con imparcialidad, por personas entendidas muy ajenas a influencias místicas (sic), entre treinta y cuarenta mil personas.» [11]. Quince días después corrigió su primer estimado: «El 13 de octubre, según los cálculos de gente completamente objetiva, se dice que se reunieron algo así como cincuenta mil personas en el páramo de Fátima.» [12]. Un periódico neutral, el Primeiro de Janeiro, también estimó el tamaño de la muchedumbre en cincuenta mil personas. De esta manera uno puede decir, con cierta certidumbre, que ese es el mínimo estimado; esta es la razón por la que los historiadores proponen que la muchedumbre estuvo constituida probablemente de unos 70 mil testigos.

IR A CONTENIDO

Una multitud diversa. Aunque la multitud estuvo constituida principalmente de campesinos, como Avelino de Almeida notó, toda la población de Portugal estuvo representada en Cova da Iria. ¿Se pudo notar entre la multitud tal diferenciación tan abigarrada? Gente de toda clase, de todas las regiones del país, de todos las clases sociales y niveles culturales, los fieles que esperaban ver un milagro, los fanáticos y escépticos descreídos, todos lado a lado, esperando y preparándose por lo que pudiese ocurrir, colocándose en el mejor lugar posible.

«En el momento del gran milagro», nota el historiador portugués, Leopoldo Nuñes, «estuvieron presentes los hombres de letras, de las artes y de las ciencias más ilustres, y casi todos eran incrédulos que asistieron por simple curiosidad, atraídos por las predicciones de los videntes.» [13] Después de hacer el relato del evento, consignaremos algunas de las reacciones de esos personajes, ¡Incluso el Ministro de Educación de la nación, del gobierno masónico, estuvo ahí! Analizaremos también su versión de los hechos.

Aunque la gran masa del pueblo estaba compuesta de fieles, habían muchos curiosos e incrédulos. ¡Ellos habían venido a ver, a divertirse y a burlarse de la credulidad de los otros! [14]

Finalmente, apuntaremos que un buen número de creyentes, de practicantes católicos, no estaban predispuestos a creer en las apariciones. Entre ellos habían muchos que habían permanecido en la orilla de la carretera de Leiria, observando el espectáculo de lejos, bien refugiados en sus coches, como fue el caso del Dr. Almeida Garret, el Prof. Ferreira Borges o el abogado Pinto Coelho, con quien regresaremos después…

13 de octubre de 1917. Antes de la aparición. Como puede verse desde una toma elevada de Cova da Iria, durante la mañana. «Llegué al mediodía. La lluvia, que había caído desde la mañana, fina y persistente, propulsada por un fuerte viento, continuó cayendo…» (Dr. Almeida Garrett).

IR A CONTENIDO

La hora se aproxima…

«La presencia de los videntes (escribe Avelino de Almeida) fue anunciada quizás media hora antes del momento indicado para la aparición [15]. Las pequeñas niñas, coronadas con flores, son guiadas al lugar donde se colocó una plataforma. La lluvia continuó sin detenerse, pero nadie perdió la esperanza. Algunos coches llegaban a último minuto; grupos de fieles se arrodillaban en el lodo a petición de Lucía, y les ordenó que cerraran sus paraguas. La orden se transmitió y ejecutó de inmediato, sin resistencia.» [16]

IR A CONTENIDO

A mediodía, la hora del sol… Los relojes marcaban casi las 13:30 [17]. Cerca de los videntes, un sacerdote, quien había pasado toda la noche aquí, comenzaba a impacientarse:

«El les preguntó a qué hora se aparecería Nuestra Señora, recuerda María Carreira. “A mediodía”, dijo Lucía. El sacerdote miró su reloj y dijo: “¡Mira, ya es la hora! ¡Nuestra Señora no miente!… ¡bueno, bueno!…” Después de unos minutos dijo de nuevo: “¡Ya es la hora!, ¡como verás, es un engaño!, ¡váyanse, todos ustedes!…”

«Pero Lucía se negó a irse y el sacerdote comenzó a empujar con sus manos a los tres niños. Lucía quien estaba más cerca de él, llorando le dijo: “Si alguien desea irse, puede hacerlo, yo permaneceré aquí. ¡Nuestra Señora dijo que vendría, ella ha venido otras veces y vendrá esta vez también!”

«Al mismo tiempo que dirigía la vista hacia el este, le dijo a Jacinta: “¡Jacinta, arrodíllate, Nuestra Señora ya viene, puedo ver su resplandor!”

«¡El sacerdote no dijo nada más y nunca lo volvía a ver!» [18]

IR A CONTENIDO

La serie de maravillosos fenómenos.

Comparando los numerosos testimoniales, podemos distinguir sin equivocación varios aspectos en el orden de los pasmosos eventos observados por ellos [19]. Para este análisis, que intentará reconstruir los fenómenos observados en sus diversas fases, seguiremos principalmente el registro del Dr. Almeida Garrett, profesor de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Coimbra. Este registro es producto de una persona educada, acostumbrada a hacer observaciones sutiles y precisas, las cuales expresa con perfecta claridad [20].

IR A CONTENIDO

i. El momento de la aparición: Una columna de nubes.

He aquí el primer maravilloso hecho observado por el Dr. Almeida Garrett:

«Deben haber sido como las 13:30 en el horario legal, y aproximadamente mediodía en el horario solar, cuando sobre el punto exacto donde se encontraban los niños había una columna fina, esbelta y azulada de humo que se alzó unos dos metros sobre sus cabezas y desapareció en las alturas. Este fenómeno, que fue perfectamente visible a simple vista, duró sólo unos segundos. No habiendo tomado el tiempo, no podría decir si duró menos de un minuto o más. El humo repentinamente desapareció y unos pocos momentos después el fenómeno se repitió por segunda y tercera vez. Las tres veces, y especialmente en la última, las columnas subieron y desaparecieron en la atmósfera gris.

«Miré en esa dirección con mis anteojos puestos, no fui capaz de ver nada excepto las columnas de humo, pero estaba convencido de que había sido producido por algún incensario que estaba balanceándose. Entonces unas personas, cuya fe es irreprochable, me dijeron que este fenómeno fue consistente en los días 13 de los cinco meses previos, y que nadie los había producido mediante fuego, ni esta ni las otras veces.»[21]

El profesor dijo al principio de su testimonio que él se encontraba a menos de 100 metros del encino. Así, él estaba en buena posición para observar todo con precisión.

IR A CONTENIDO

ii. La repentina interrupción de la lluvia.

Aunque había estado lloviendo toda la mañana, durante la aparición la lluvia cesó por completo, y de repente se aclaró el cielo.

«El cielo, que había estado encapotado todo el día, se aclaró inesperadamente, la lluvia cesó y toda la campiña se veía como si la luz del sol la llenara completamente, la cual, durante la mañana invernal había estado tan triste…» [22]

Este súbito cambio en el clima sorprendió a todos los testigos:

«Era un día lluvioso, con una lluvia fina y persistente. Pero momentos antes del milagro cesó la lluvia.» [23] «La lluvia cesó repentinamente.» (Dr. Pereira Gens) «En este momento, salí del coche, y al extender la mano hacia mi esposa para ayudarla a salir, las nubes desaparecieron súbitamente sin el menor rastro de brisa, y el sol estaba brillando en un cielo claro.» (Profesor Ferreira Borges) [24].

La multitud esperaba expectante. Los creyentes pensaron que el milagro estaba por suceder:

«La milagrosa demostración, el signo visible que había sido anunciado estaba a punto de suceder, dijeron muchos peregrinos.» [25] Mientras tanto, los espectadores más indiferentes comenzaron a impacientarse: «… Me encontraba mirando en el punto de las apariciones»,

escribe el Dr. Almeida Garrett,

«con una expectativa serena, incluso fría, de lo que pudiera suceder y con cada vez menos curiosidad debido al largo tiempo que pasó sin que nada sucediera ni llamara mi atención…

«El sol, unos momentos antes se había abierto paso entre la gruesa capa de nubes que lo habían ocultado y brilló clara e intensamente.» [26].

IR A CONTENIDO

iii. La visión del sol.

«Repentinamente escuché los gritos de miles de voces y vi que la multitud se dispersaba a mis pies, aquí y por allá se concentraban en pequeños grupos alrededor de los árboles, dando la espalda al punto al que dirigían antes su atención, y volteaban a ver al cielo, del lado opuesto.

«Entonces ellos observaron un espectáculo único»,

enfatiza el reportero de O Seculo,

«un espectáculo increíble para cualquiera que no lo haya visto. Desde la carretera… uno podía ver a la inmensa multitud voltear hacia el sol, el cual apareció sin la oposición de las nubes y en su zenit.

«Éste recordaba a un disco llano de plata y era posible mirarlo sin la menor molestia. Pareciera que un eclipse tomaba lugar.» [27].

El Dr. Almeida Garret, quien observaba las cosas con mayor profundidad, quiso expresar con mucha precisión lo que sus ojos vieron:

«Observé el “magneto” que parecía atraer todas las miradas y lo vi como un disco de bordes limpios, luminoso y brillante, pero que no lastimaba los ojos.

«No estoy de acuerdo con la comparación que escuché en Fátima, la del disco llano y plateado. Era mucho más claro, rico, brilloso en sus colores, y tenía un lustre perlado.

«Tampoco lo compararía con la luna en un cielo claro, ya que uno lo veía y lo sentía como un cuerpo viviente. No era esférico como la luna, parecía como una rueda glaseada, hecha de madreperla…

«No podía confundírsele, no había neblina que lo ocultara, y no estaba opaco, difuminado o velado. En Fátima irradió luz y calor y aparecía con sus bordes bien definidos en forma de rueda.

«El cielo estaba moteado con pequeños cirros que dejaban ver el cielo entre ellos, por aquí y por allá, pero el sol muchas veces permaneció en lugares de cielo limpio. Las nubes pasaban de este a oeste y no oscurecían la luz del sol, dando la impresión de que pasaban detrás de éste, aunque algunas veces estas motas de blanco tomaban tonos rosados o de azul diáfano cuando pasaban frente al sol.

«Un hecho admirable fue el que uno pudiese fijar la vista en este brasero de luz y calor, sin dolor en los ojos o enceguecer la retina.

«El fenómeno, excepto por dos interrupciones cuando el sol parecía enviar rayos refulgentes de calor que nos obligó a desviar la mirada, debió haber durado unos diez minutos.» [28].

Ti Marto, quien nos dejó un breve registro del evento, el cual es particularmente notable por la precisión de sus observaciones, también declaró:

«Lo más extraordinario fue que el sol no dañó nuestros ojos, en lo absoluto.» [29].

13 de octubre de 1917: El Gran Milagro. Algunos peregrinos en la imagen durante la danza del sol. «Miles de las criaturas de Dios cayeron sobre sus rodillas, sobre el suelo empapado… ¡todos lloraban, todos rezaban, los hombres sostenían sus sombreros en las manos, bajo la espectacular impresión del esperado milagro! Estos segundos, estos instantes, parecieron horas, ¡tan intenso fue lo que vivieron!» (O Dia, 19 de octubre de 1917).

IR A CONTENIDO

iv. La triple danza del sol.

Inesperadamente el sol comenzó a temblar, sacudiéndose con movimientos consecutivos, finalmente comenzó a girar sobre sí con rapidez vertiginosa, esparciendo rayos de luz con todos los colores del arco iris. Dejemos que un testigo lo cuente:

«El sol tembló, el sol realizó increíbles movimientos repentinos fuera de todas las leyes cósmicas, el sol “danzó”, según la típica expresión de la gente.»[30]

«Se sacudió y tembló, parecía una rueda de fuego.» (María da Capelinha).

Esta expresión se encuentra en muchos testimoniales.

«Giró como una rueda de fuego, tomando todos los colores del arco iris.» [30]. Parecía «como una bola de nieve, girando sobre sí.» (Padre Lourenço). «El disco solar no permaneció inmóvil. Esto no fue como el titileo de un cuerpo celeste, ya que giró sobre sí mismo en un frenético arremolinamiento.» (Dr. Almeida Garrett).

«Repentinamente», escribió el Padre Pereira da Silva en una carta enviada la misma noche del 13 de octubre, «el sol apareció con su circunferencia bien definida. Bajó hasta la altura de las nubes y comenzó a girar vertiginosamente, dando la impresión de ser una bola de fuego cautiva. Con algunas interrupciones, esto duró aproximadamente ocho minutos.» [32].

Muchos testigos mencionan estas interrupciones, Ti Marto lo relata con precisión:

«En ciertos momentos el sol parecía detenerse y volver a comenzar, a moverse y a danzar.» [33] «Sin embargo, el sol se detenía sólo para comenzar de nuevo su extraña danza desde el principio, después de una breve interrupción, girando sobre sí, dando la impresión de aproximarse o retroceder.» (Dr. Pereira Gens de Batalha. En este tiempo el era estudiante en Coimbra) [34].

Así, la “danza del sol” que miles atestiguaron y afirmaron, en realidad se repitió tres veces.

IR A CONTENIDO

v. «Todos los colores del arco iris»

Primero revisemos la descripción del Dr. Almeida Garrett:

«Durante el fenómeno solar, el cual ya he descrito en detalle, hubieron cambios de coloración en la atmósfera. Mirando al sol, noté que todo se oscurecía, primero miré a los objetos más cercanos y luego extendí la mirada tan lejos como el horizonte. Vi todo de un color de tono amatista [azulado], los objetos que me rodeaban, el cielo y la atmósfera, eran todos del mismo color. Un encino cercano lanzaba una sombra del mismo color sobre el suelo. Entonces escuché a un campesino próximo gritar con estupefacción: “¡Miren, esa señora es toda amarilla!” Y de hecho todo, cercano y lejano, había cambiado, tomando la coloración amarillenta de un viejo damasco. La gente se veía como si sufrieran de ictericia y me recordó una sensación de diversión al ver que todos lucíamos tan feos y poco atractivos. Mi propia mano era del mismo color.» [35].

«El sol produjo diferentes colores: amarillo, azul, blanco…», reportó María da Capelinha [36].

María do Carmo recuerda:

«El solo lució todos los colores del arco iris. Todo tomaba los mismos colores: nuestros rostros, nuestras ropas, la tierra misma.» [37] «Una luz cuyos colores variaron de un momento a otro reflejándose en las personas y las cosas», nota el Dr. Pereira Gens. Ti Marto: El sol «lanzó rayos en diferentes direcciones pintados de diferentes colores.» [38].

Un testigo de Alburitel, el Padre Inacio Lourenço, apuntó que los objetos tomaban diferentes colores, dependiendo de su localización: «Los objetos que nos rodeaban tomaban todos los colores del arco iris. Nos vimos azules, amarillos, rojos…» [39].

IR A CONTENIDO

vi. La caída del sol: «el sol parecía que caía sobre la tierra».

«Entonces, súbitamente», relata Almeida Garrett, «se escuchó un clamor, un grito de angustia que salía de la multitud. El sol, que giraba frenéticamente, parecía desprenderse del firmamento y avanzaba amenazante sobre la tierra como si fuese a impactarla con su enorme y fiera masa. La sensación durante esos momentos fue terrible.» [40].

«El sol… comenzó a moverse y danzar hasta que parecía separarse del cielo y nos caía encima. ¡Fue un momento terrible!» (Ti Marto) [41].

«Parecía como si la rueda de fuego comenzara a caer sobre la gente.» (María da Capelinha).

Alfredo da Silva Santos: «El sol comenzó a moverse y en cierto momento pareció desprenderse del cielo y comenzar a precipitarse sobre nosotros como una rueda en flamas.» [42]

«Inesperadamente parecía caerse en zigzag, amenazante sobre la tierra», recuerda el Padre Lourenço [43].

Observando esta unanimidad, es fácil ver la razón por la que el Padre da Fonseca sin gran dificultad puede refutar los alegatos del Padre Dhanis, que minimizan este acontecimiento. Entre otros, el cita varios testimoniales muy interesantes, el del Baron de Alvaiazere [44], a quien el Canónigo Barthas en su momento interrogó:

«El sol giró sobre sí mismo en su zenit; se desprendió y descendió hacia la derecha, todo mientras giraba con movimientos rápidos nunca vistos antes, a la izquierda y a la derecha; habiendo llegado casi a la línea del horizonte, volvía a su zenit, a la izquierda, trazando una especie de elipse truncada en su camino de regreso.» [45].

Los espectadores tuvieron la irresistible impresión de que el sol les caía encima: «Amenazó con caer sobre nosotros» (Dr. Pereira Gens);

«Vimos al sol caer sobre nosotros…» (Padre John Gomes Menitra);

«… nos dio la impresión de que estaba a punto de caer sobre nosotros» (Mario Godinho) [46]. Fue un momento tan terrible que mucha gente se desmayó.

«Finalmente, el sol se detuvo y todos respiraron con alivio…» recuerda María da Capelinha [47].

IR A CONTENIDO

vii. «Las ropas de todos se secaron».

El último hecho sorprendente: toda esta gente, quienes en su mayoría estaban empapados hasta los huesos, notaron con alegría y estupefacción que estaban completamente secos. El hecho fue atestiguado en el proceso canónico, y en la investigación personal que el académico Marques da Cruz hizo sobre el asunto. El escribe:

«Esta enorme multitud estaba empapada, ya que había llovido desde el amanecer. Pero, aunque todo esto parezca increíble, después del gran milagro todos se sintieron con comodidad y encontraron que sus ropas estaban completamente secas, un hecho que maravilló a todos… La verdad de este hecho ha sido garantizado por la sinceridad de docenas y docenas de personas de absoluta credibilidad, a las cuales he conocido desde la niñez y quienes aún viven (1937), así como por personas de varios distritos del país quienes estuvieron presentes.» [48]

La hermana Lucía, quien fue absorbida por un éxtasis, no se dio cuenta de nada de esto, por lo que ni siquiera se le ocurrió jamás mencionar este punto. Ella declaró al Canónigo Barthas:

«Sin embargo, algunas monjas de mi congregación, quienes están todavía en el mundo y estuvieron presentes en Fátima ese día, me aseguraron la realidad de ese fenómeno.» [49]

¿Cómo podemos explicar este hecho? El registro del Dr. Pereira Gens nos da una pista sobre la respuesta:

«… Continuaba lloviendo tan fuerte que a pesar de nuestros paraguas nadie conservaba una puntada seca en la ropa… La lluvia súbitamente paró, las nubes se abrieron, y el sol fue visible en todo su esplendor. Nuestra ropa estaba mojadas y nuestros cuerpos fríos; todavía recuerdo la deliciosa sensación de esta templada caricia que el sol me hizo…»

Y después de mencionar la danza del sol, continúa:

«Aunque es verdad que la luminosidad del sol fue disminuida, su calor no perdió su poder, Ahora sentía seca mi ropa aunque todos estábamos empapados unos momentos antes.» [50]

En A Ordem, Pinto Coelho realizó una narración análoga:

«El sol parecía… desprenderse del cielo y aproximarse a la tierra, irradiando mucho calor.» [51] «Sentimos el calor como si hubiésemos entrado en una sala de vapor muy caliente», comentó María de Vieira Campos [52].

IR A CONTENIDO

viii. La visión del prodigio solar a la distancia.

Un maravilloso hecho es que el fenómeno pudo ser admirado tan lejos como a 3 o 5 kilómetros de distancia de Fátima. Existen testimoniales perfectamente creíbles de quienes estuvieron mucho más lejos de Cova da Iria, y que relataron cómo habían visto este espectáculo inaudito de la danza del sol, exactamente como lo relataron los miles de peregrinos reunidos alrededor del encino de la aparición.

IR A CONTENIDO

En Sao Pedro de Muel. A una distancia de aproximadamente 40 kilómetros de Fátima, mientras se encontraba en el pórtico de su casa, a la orilla del mar, en Sao Pedro de Muel, el poeta Alfonso Lopes Vieira insospechadamente fue sorprendido por el espectáculo más inusual:

«Aquel día, el 13 de octubre de 1917, sin recordar las predicciones de los niños, fue encantado por el más notable espectáculo del cielo y de una clase que nunca vi antes. Lo ví desde este pórtico.»

Todos sus familiares lo vieron junto con él [53].

IR A CONTENIDO

La Villa de Alburitel. En la villa de Alburitel, toda la población gozó de la visión del prodigio solar. El testimonio citado con más frecuencia es el del Padre Inacio Lourenço, ya que es el más detallado. Pero todos los buenos aldeanos, cuando fueron interrogados por los historiadores, confirmaron que vieron las mismas cosas que él observó, y de la misma manera.

«Yo tenía solo 9 años en ese tiempo, e iba la escuela local de la villa (aproximadamente a 19 kilómetros de Fátima)

«Aproximadamente al mediodía fuimos sorprendidos por los gritos y alaridos de algunos hombres y mujeres quienes pasaban por la calle, frente a la escuela. La maestra, una buena y pía mujer, aunque nerviosa e impresionable, fue la primera en correr hacia la calle, siguiéndola todos los niños. Afuera, la gente estaba gritando y llorando, apuntando hacia el sol, ignorando las preguntas de la maestra.

«Fue un gran milagro, el cual pudo observarse bastante bien desde la loma en la que estaba situada mi villa…

«Me sentí incapaz de describir lo que vi y sentí. Miré fijamente al sol, el cual se veía pálido y no lastimaba los ojos. Como si estuviese mirando una bola de nieve girando sobre sí misma, y súbitamente parecía venirse abajo en zigzag, amenazando a la tierra. Aterrorizado, corrí y me escondí entre las personas, quienes estaban llorando y esperando el fin del mundo en cualquier momento.

«Durante estos largos momentos del prodigio solar, los objetos que nos rodeaban tomaron la coloración del arco iris…» [54].

Otros testigos ofrecieron una versión similar cuando fueron interrogados por sucesivos investigadores: la maestra, Delfina Pereira Lopes, su hija Myriam, quien llegó a ser la Hna. María do Carmo, el Padre Joaquim Lourenço, el hermano del Padre Inacio, etc. Incluso más que en el caso de Cova da Iria, aquí fue una cuestión para cualquier historiador de “meter los testimonios en la olla” y verificar y comparar con precisión, con lo que había sido publicado.

IR A CONTENIDO

Hechos históricos incuestionables.

Estos son los hechos, los cuales fueron vistos y sentidos por aproximadamente cincuenta mil testigos, todos los cuales observaron el mismo espectáculo. A un amigo racionalista, profundamente perturbado por el pasmoso fenómeno que había observado en Cova da Iria y que trataba de dilucidar cuáles eran sus más profundas convicciones, Avelino de Almeida le replicó con franqueza:

«Ciertamente, nuestros ojos y nuestros oídos no pudieron haber percibido cosas diferentes.» [55]

Es importante remarcar que, sin tomar en cuenta las interpretaciones que se le adjudiquen, el prodigio solar de Fátima es un hecho incuestionable, un hecho histórico sólidamente establecido. Ha sido más firmemente establecido que el conjunto de hechos firmemente mantenidos por la historia y de los que a nadie se les ocurriría sospechar. Por lo que debe decirse que los acontecimientos históricos igualmente legitimados por tal número de testigos, ¡son extremadamente raros!

Lo que queda ahora es tratar de proponer una adecuada explicación para este fenómeno, del que nunca se ha encontrado algo similar en los anales de la historia. Pero esto pertenece a otro orden y a otras disciplinas. Una vez que la historia ha establecido la realidad de los hechos, es a la ciencia a la que toca proponer soluciones.

«Todos los fenómenos que he descrito (escribe el Dr. Almeida Garrett), fueron observados por mí en un estado calmo y mentalidad serena y sin ninguna perturbación emocional. Finalmente, debo declarar que nunca, antes del 13 de octubre hube observado algún fenómeno atmosférico o solar similar.» [56]

Avelino de Almeida notó, por su parte, después de hacer énfasis sobre la unanimidad de los testigos:

«No es menos cierto cuán raros son aquellos quienes permanecen insensibles ante la grandeza de tal espectáculo, el cual ciertamente es único, y en cada aspecto, digno de meditarse y de estudiarse…» [57].

IR A CONTENIDO

II. La ciencia: un milagro incuestionable.

Ya que esto es una cuestión de fenómenos cósmicos o atmosféricos, ¿podrían las ciencias naturales proponer algunas explicaciones? ¿Pueden estos perturbadores acontecimientos, observados en Cova da Iria, ser explicados por medio de las leyes ordinarias de la astronomía o la metereología?

IR A CONTENIDO

i. Las ciencias naturales: un fenómeno extraordinario.

La opinión de un astrónomo.

«¿Qué debemos pensar de los fenómenos cósmicos que miles de personas dijeron haber visto en Fátima?» Tal es la pregunta que el periódico O Seculo propuso al director del Observatorio de Lisboa, el Sr. Frederick Oom.

«El muy ilustre astrónomo tuvo la gentileza de darnos la siguiente respuesta»,

leemos en O Seculo del 18 de octubre:

«Si hubiese sido un fenómeno cósmico, los observatorios no lo habrían pasado por alto. Y esto es precisamente lo que falta, la inevitable apreciación de cualquier disturbio en el sistema solar, sin embargo, pequeña. Desde entonces…» [58]

Guardaremos para después el final de la cita. La cual ya no cae dentro del interés de la competente opinión de un científico. Además, difícilmente se hizo necesaria la consulta a la Facultad para darse cuenta que el sol no se había movido, ¡y que nada lo había perturbado de su movimiento regular de rotación y revolución! Si realmente se hubiese aproximado a la tierra, como miles de espectadores tuvieron la aterrorizante impresión de que así fue, hubiese significado el fin del mundo y nuestro planeta habría desaparecido instantáneamente en la gran conflagración anunciada por San Pedro para el día final de la Parusía: «Pero el día del Señor vendrá como ladrón, y entonces pasarán los cielos con gran estruendo, y los elementos se disolverán para ser quemados, y la tierra y las obras que hay en ella no serán más halladas.» [Traducción bíblica de Mons. Juan Straubinger -TMJS-] (2Pe. III, 10).

En este sentido, el veredicto del astrónomo es incontestable: el prodigio solar de Fátima no pertenece a su disciplina.

IR A CONTENIDO

Una explicación metereológica. ¿Fue entonces un simple fenómeno atmosférico, en conformidad con la natural interacción de las leyes de la meteorología? ¡No!, de nuevo. Ya que nunca fue visto tal fenómeno por nadie, ni incluso algo remotamente comparable a lo que sucedió en Cova da Iria.

¿Cómo podría mantenerse que «la delgada, sutil y azulada columna de humo», que se manifestó tres veces frente al encino antes de desaparecer completamente, fue un simple fenómeno natural? En cuanto a la hipótesis del fraude, es prácticamente insostenible, dada la atenta presencia de una muchedumbre de testigos, muchos de los cuales habían estado presentes en el punto de las apariciones desde una noche antes.

Y entonces, especialmente, ¿cómo puede reducirse a un fenómeno ordinario el simple hecho de que una muchedumbre pudiese observar directamente al sol por espacio de diez minutos sin protección alguna mientras el sol mismo, según la versión unánime de los testigos, apareció claramente en el cielo, donde las nubes desaparecieron y donde no había ni neblina? Las fotografías dan prueba de ello: difícilmente podríamos encontrar a alguien protegiéndose los ojos con las manos. Ellos miran hacia el sol, extasiados.

Y finalmente, ¿cómo podemos explicar por medio de las leyes de la meteorología el increíble espectáculo de la “triple danza” del sol a plena luz del día, proyectando rayos de luz multicolores como el arco iris, y girando sobre sí mismo como una rueda de fuego antes de descender culebreando hacia la tierra, amenazando con impactarla con su fiera masa? No, nunca. Al menos, ninguna que explique todos los hechos. Por ello es fácil explicar el hecho distorsionándolo por completo, reconstruyendo los eventos a voluntad, sin tomar en cuenta la realidad.

La conclusión puede ser afirmada en una sola oración, y para replicarla racionalmente uno debe ser capaz de contribuir al expediente con hechos, argumentos e hipótesis sólidas: El prodigio solar de Fátima no puede ser explicado por medio de la simple interacción de las fuerzas naturales, y las leyes que regulan su curso natural son las más adecuadas para dar cuenta de ello.

¿Esto significa que las ciencias naturales no pueden estudiar este evento y que el fenómeno necesaria y completamente se sale de sus manos? Esto no es cierto. Y al final de nuestra investigación veremos cuán importante es el papel que todavía funge para cualquier evento. Pero no nos adelantemos…

IR A CONTENIDO

ii. Sicología: un fenómeno objetivo.

Continuemos con el artículo “científico” de O Seculo. Nuestro astrónomo, observando que el fenómeno solar de Fátima fue «completamente ajeno a la rama de la ciencia que el practica», no se contento con detenerse después de su respuesta negativa: «Así que,», replicó el periodista, «¿tuvo este fenómeno una naturaleza sicológica?», respondió el astrónomo, «¿por qué no? No hay duda de que fue el efecto de una sugestión colectiva.» [58a]

IR A CONTENIDO

Un mito persistente: “La alucinación colectiva”. Desde el 13 de octubre de 1917 hasta nuestros días, la “alucinación colectiva” ha sido la única solución que continuamente repiten los intelectuales de toda persuasión, ateos, agnósticos, liberales o modernistas. Esto les ha permitido tranquilizarse, dando al fenómeno de Fátima sólo una atención distraída o despreciativa. La causa ha sido juzgada, ¡obviamente ha sido alguna especie de “alucinación colectiva”!, ¡listo!

De André Lorulot a Gerard de Sede, sin mencionar al Padre Jacquement, el instruido editor de la enciclopedia Catolicismo, y podríamos prolongar la lista casi indefinidamente, todos ellos están en la misma frecuencia, manteniendo imperturbables la misma tesis expresada por Henri Fesquet: «Indudablemente es alguna clase de ilusión óptica que resultó por una muchedumbre a la expectativa de un milagro.» [59]

La impresionante unanimidad a favor de esta hipótesis nos lleva a considerar seriamente la cuestión: ¿qué es esta “alucinación colectiva” de la que todos hablan y que nadie sabe definir?

IR A CONTENIDO

¿Qué es una “alucinación colectiva”? Es muy difícil hacerse de una buena idea de lo que significa o lo que se quiere expresar con “alucinación colectiva”, ya que los manuales de sicología son notablemente frugales en esta materia. Un amigo siquiatra nos escribió: «Ningún manual de sicología trata esta cuestión de forma seria». De hecho, en el monumental tratado sobre las alucinaciones, del gran especialista Henry Ey (de 1543 páginas) [60], ni un solo capítulo trata sobre esta cuestión.

Por el contrario, las «cuatro ideas directrices» que son desarrolladas en el curso del trabajo muestran que la noción de “alucinación colectiva”, como es comúnmente empleada, y de forma notable en el caso de Fátima al tratar de ofrecer una explicación natural del fenómeno, no corresponde a ningún tratado genuinamente científico.

El tener alucinaciones es «tomar objetivamente como verdad algo que no existe como objeto.» [61] En otras palabras, es creer en la existencia objetiva de las cosas puramente imaginarias. El autor demuestra que este desorden no le sucede a cualquiera ni por causas fortuitas. Cuatro “ideas directrices” forman la estructura de esta tesis:

1. La alucinación no puede ser efecto de una mera «excitación neuro-sensorial».

2. «Las alucinaciones no son y no pueden ser sólo las proyecciones de una emoción, aunque sean inconscientes… Se requiere de otra dimensión, de un defecto o brecha en el sistema de realidad.»

3. «La alucinación sólo puede aparecer donde existe una “desorganización psíquica”, o “desorganización de los sistemas psico-sensoriales”.»

4. En resumen, «la alucinación es un fenómeno patológico» [62]. «La alucinación siempre es el efecto, ya sea de problemas en las funciones de percepción, o de la destrucción del ser consciente.» [63]

La conclusión es que quien alucina siempre es alguien que padece una afección psico-sensorial, un enfermo.

Si el prodigio solar de Fátima quisiese explicarse por medio de la alucinación, ¡equivaldría a decir que cincuenta o sesenta mil testigos, sin excepción, tuvieron una enfermedad mental!

Pero, podría decirse, aquí interviene el “contagio mental”, por el cual un alucinador puede transmitir su error a toda la multitud… Esta sería una afirmación nueva y completamente gratuita, y sin base científica. Aparte del caso de los drogadictos quienes absorberían las mismas drogas alucinógenas, la noción popular de “alucinación colectiva” no corresponde a ninguna experiencia real.

Aquellos quienes utilizan esta idea para eliminar de su cabeza la perturbadora noción propuesta por Fátima son incapaces de citar un solo ejemplo auténtico donde la “alucinación colectiva” haya sucedido, incluso para el caso de una docena de personas. Y así, desde que Gustave Le Bon, quien fue el primero en proponer este disparate, ¡en 1896!, esta tesis continúa siendo utilizada sin vergüenza alguna, como si, desde entonces, todas los sólidos logros de la ciencia no mostraran cuán absurda es esta tesis [64]. ¿Por qué este empecinamiento de tratar a tal mito tan respetuosamente? Porque es el último recurso al que un racionalista puede recurrir cuando surgen problemas… es su recurso final, ¡es la panacea contra los milagros!

IR A CONTENIDO

El prodigio solar: “Una visión de ilusión colectiva”. Tal es la solución propuesta por Gerard de Sede en 1977. He aquí sus palabras exactas:

«Estamos suficiente familiarizados con la clase de lógica subjetiva que obedecen los que podemos llamar ‘sicología de los testigos’: primero uno desea que ha visto, entonces cree que ha visto, y finalmente dice que ha visto. De esta manera, sin haber atestiguado la prometida aparición de la Sagrada Familia, muchas personas afirmaron en compensación que ellos vieron al sol cambiando de color y danzando, desafiando las inflexibles leyes del movimiento celeste.» [65].

¡Y esto es todo! En todo esto consiste la explicación racionalista del fenómeno solar de Fátima.

Es claro y simple, pero sin valor por dos razones. Primero que nada la ley psicológica que se formula es pura invención: ¡ningún testigo normal se solicita de esta manera! Y tampoco, debido a esta ley que es pura ficción, se aplica al fenómeno que afirma explicar. Para hacerlo, su autor se ve forzado a distorsionar los hechos o a ignorarlos miserablemente.

IR A CONTENIDO

Los testigos distantes. ¿Por qué, por ejemplo, este objetor no dice una sola palabra acerca de la villa de Alburitel, a más de 14 kilómetros de Fátima, donde toda la población, que no estaba a la expectativa, atestiguo en el mismo momento exactamente el mismo fenómeno extraordinario?

IR A CONTENIDO

El testimonio de los incrédulos. Además, incluso en el caso de Fátima, ¿cómo podemos mantener, sin mentir, que todos estaban esperando la realización de un milagro o la aparición de la Sagrada Familia? Debido a que este fue un hecho histórico que muchos incrédulos atestiguaron, ¡es que numerosos sectarios han venido con el propósito expreso de acallar ansiosamente a todos diciendo que no vieron nada! Ahora, incluso los curiosos, como el editor de O Seculo, para el caso que nos ocupa ¿cómo es que G. de Sede no cita su testimonio?, o el de los fanáticos quienes apasionadamente no deseaban ver nada y fueron obligados a confesar que algo había sucedido ahí.

En la noche del día 13, Avelino de Almeida concluyó su artículo enfatizando que «los librepensadores y otras personas que no estaban relacionadas con asuntos religiosos», fueron «naturalmente impresionados» por lo que habían visto. El ejemplo típico de estos incrédulos a quienes se les sacudieron sus convicciones, fue el Alcalde de Santarem, Antonio de Bastos, quien estuvo tan perturbado que le escribió a su amigo Avelino de Almeida para solicitarle sus más profundos pensamientos sobre el asunto. El periodista le respondió por medio de su artículo en Illustraçao Portuguesa.

Fácilmente podemos citar el testimonio de Mario Godinho, este joven ingeniero totalmente incrédulo, y que fue zarandeado por el evento; y para este propósito, he aquí el testimonio del Barón de Alvaiazere, el cual es característico de la mentalidad de la mayoría de la gente ilustrada de aquel tiempo:

«Habiendo llegado a Fátima, sólo por diversión, declaró ante la comisión investigadora, considerando todo lo que había escuchado sobre las apariciones como una tomadura de pelo, me encontré con varios amigos ahí. Comencé haciendo comentarios irónicos sobre los eventos al punto que varios de ellos me confrontaron por pensar diferente.»

«Estaba preparado para mantener una mentalidad abierta, sin importar lo que sucediera. Recordé el principio de Gustave Le Bon, el cual dice que un individuo influenciado por un grupo no puede escapar de la corriente hipnótica que lo domina. En este estado mental, atestigüe el fenómeno solar.»

Termina su testimonio declarando:

«Sólo yo supe lo que grité: ¡Creo!, ¡creo!, ¡creo! Y las lágrimas brotaron de mis ojos. Estaba maravillado, extasiado ante esta manifestación del poder divino.» [66]

En cuanto al testimonio del Ministro de Educación de la nación, Antonio Sergio, citado por G. de Sede, aquí está:

«Cuando el sol apareció, había pocas nubes que lo rodeaban y las cuales, bajo el efecto de la tormenta fueron dirigidas por los movimientos giratorios que nada tenían de sorprendente.» [67]

¿La tormenta?, nadie más atestiguó esto ni la menciona. Pero si el ministro vio nubes “dirigidas por los movimientos giratorios [del sol]”, ¡esto difícilmente puede ser un fenómeno banal! Ya que explicar todo el fenómeno por la presencia de “nubes alrededor del sol”, ¡eso sería afirmar un fenómeno aún más maravilloso que el que relataron los 70 mil testigos normales! ¡El sol tendría que haber descendido mucho para que las nubes fuesen capaces de engancharse con éste, de la forma descrita! En resumen, nuestro testigo, cegado por su pasión, patéticamente comienza hablando disparates y sus torpes explicaciones lo traicionaron. El observó lo mismo que los demás, pero sus principios [torcidos] y su cargo no le permitieron admitirlo.

IR A CONTENIDO

Los creyentes son testigos creíbles. Aún hay más. Si por preferencias invocáramos las declaraciones de los escépticos como argumentos ad hominem, sería muy dudoso que su testimonio fuese más creíble que el de los creyentes. La mejor prueba de la inmensa capacidad de autosugestión atribuida a ellos es pura invención, y se encuentra en el hecho de que el 13 de septiembre [un mes antes del prodigio del sol], Ti Marto mismo o su esposa Olimpia, María Rosa o Carlos Mendes, el Padre Formigao o el Padre da Silva, etc., declararon que no vieron nada, mientras la multitud entusiasta alrededor de ellos ¡describían lo que vieron!

IR A CONTENIDO

Un milagro que era esperado, pero impensable e imprevisible. Enfaticemos finalmente que, aunque los fieles sabían con antelación el momento del milagro, ninguno de ellos pudo haber adivinado acerca de su naturaleza. Algunos pensaron en la repentino final de la guerra, o la aparición de la Santísima Virgen ante todos [68]. Lo que es cierto es que ninguno de los 70 mil testigos pudo haber imaginado con antelación la pasmosa danza del sol que todos atestiguaron.

IR A CONTENIDO

Conclusión: un fenómeno objetivo y luminoso. La conclusión es firme, incuestionable: el prodigio solar de Fátima no puede ser aclarado por ninguna explicación sicológica sin demostrar total ceguera o una flagrante mala fe. En ningún caso puede ser una cuestión de “fantasmas” subjetivos, ¡imaginados simultáneamente por 70 mil testigos!, ¡todos los cuales habrían sido víctimas de la ilusión, la autosugestión o la alucinación! Afirmar lo anterior no tiene sentido y es absurdo.

Es razonable pensar que fue una realidad concreta, un fenómeno atmosférico luminoso perfectamente objetivo, y que fue notado por todos [los testigos] [69] y les vino de forma normal en el curso de su percepción ordinaria. [Es decir, no se aducen causas naturales externas o internas]

Entonces, ¿cuál puede ser la explicación de la causa? La sicología no puede decirnos más que lo que dijeron las ciencias naturales. Éstas deben dejar el paso a la más alta ciencia racional, la cual invoca la Causa Primera…

IR A CONTENIDO

iii. Razonamiento metafísico: la labor de la Providencia.

Si el carácter extraordinario y sobrenatural del prodigio solar implica razonablemente la intervención de la Causa creativa, otro hecho muy simple, el cual es independiente del primero, demuestra su luminosidad y en todo, certidumbre: el prodigio solar fue anunciado con tres meses de anticipación por tres pequeños pastorcillos de Aljustrel, mientras que, humanamente hablando no pudo haber sido previsto.

IR A CONTENIDO

La profecía del evento. En realidad, desde el 13 de julio los videntes habían anunciado lo que Nuestra Señora había prometido: «En octubre, haré un milagro para que todos puedan ver y creer.» Ella repitió esto el 19 de agosto y el 13 de septiembre. Esta profecía también es un hecho histórico.

Ahora, otro hecho indisputable es que todo el fenómeno atmosférico del 13 de octubre se desplegó en íntima relación con la aparición: fue sobre el encino donde la misteriosa nube se apareció. Fue a la hora anunciada con antelación que la lluvia cesó de caer. «La lluvia paró como por arte de magia» [70], escribió un testigo. Y finalmente, fue en el preciso momento cuando Lucía, volteando, le gritó a la muchedumbre, «¡miren el sol!» que el sol se volvió anormalmente visible, girando sobre sí, y danzando antes de dar la impresión de que chocaría con la tierra en una atemorizante caída.

Esta coincidencia exacta y perfecta, entre las palabras de la pequeña vidente y la realidad del grandioso fenómeno, observado por toda la multitud, exige una explicación. G. de Sede, siendo incapaz de ofrecer alguna, ¡prefiere omitir la profecía como fue registrada el 13 de julio! [71], ¡lo cual es una admisión implícita!

La única respuesta racional, que el sentido común también encuentra espontáneamente, y la cual, la alta sabiduría metafísica afirma con certeza, es sin embargo sencilla: es la misma soberana Inteligencia, el mismo Espíritu todopoderoso quien elaboró este maravilloso prodigio y lo anunció tres meses antes a los humildes pastorcillos. Afirmar esto ya no es un acto de fe, es ofrecer la única respuesta viable a un evento que es totalmente racional, y realmente científico. Nunca nadie fue capaz, ¡ni será capaz!, de proponer otra cosa. Sin importar los maravillosos progresos que se den en el futuro, las ciencias naturales nunca serán capaces de explicar… una profecía. “Eso pertenece a otro orden”, como Pascal hubiese dicho [72].

IR A CONTENIDO

iv. La teología: un impactante milagro.

En cuanto al discernimiento de los espíritus y que es tarea de la ciencia teológica, ya que Dios algunas veces permite que los espíritus de maldad realicen prodigios. ¿Fue Dios o el diablo quien se manifestó a través de tan extraordinario fenómeno? La teología debe decidir tal cuestión.

En el caso de Fátima ¡la conclusión es fácil! Ya que en todas las circunstancias que rodearon los extraordinarios eventos de Cova da Iria, nada se manifestó como contrario a la doctrina de la Iglesia, o a su moral, ni desentonó de forma alguna. Por el contrario… la calma, la piedad ejemplar, el coraje de la innumerable multitud, se manifestaron en orden perfecto, ganándose la admiración de los periodistas [73].

IR A CONTENIDO

Un milagro garantizado por la Iglesia. Henri Fesquet, repitiendo ciegamente las palabras del Padre Jacquemet, escribe con perfidia:

«La Iglesia se negó a decidirse a favor del prodigio solar, el cual se afirma que tuvo lugar el 13 de octubre… (sic) Notemos que el Obispo de Leiria discretamente ignoró esta parte de los eventos de Fátima.» [74]

¡Esto es falso! Pero ni Henri Fesquet ni el Padre Jacquemet se tomaron la molestia de leer el documento A divina Providencia del 13 de octubre de 1930, el cual proclamó el reconocimiento de la Iglesia sobre la autenticidad de las apariciones de Fátima. Aunque no hay mención del prodigio solar en las breves líneas de la fórmula canónica donde el Obispo de Leiria «declara que las visiones de los niños son dignas de creerse» y «oficialmente autoriza el culto de Nuestra Señora de Fátima», en la misma carta el Obispo da Silva explícitamente menciona el prodigio solar y afirma su carácter milagroso, de forma muy clara:

«El fenómeno solar del 13 de octubre, fue el más maravilloso de todos, y dejó grande impresión en todos aquellos quienes tuvieron la buena fortuna de verloY esta muchedumbre atestiguó todas las manifestaciones del sol, el cual rindió homenaje a la Reina del Cielo y la tierra. Este fenómeno solar… el cual no fue natural, etc.» [75]

En voz del obispo de Leiria, la autoridad de la Iglesia solemnemente confirmó el unánime sentimiento del pueblo de Portugal, formulada por la multitud en el preciso momento del prodigio: «¡Milagro!, ¡milagro!… ¡maravilla!, ¡maravilla!»

IR A CONTENIDO

III. La Fe: «Un signo espectacular».

«¡Hemos visto el Signo de Dios!, ¡hemos visto el Signo de Dios!», exclamaron los entusiastas peregrinos, espontáneamente utilizando el más exacto término bíblico, el cual también evocaba la misteriosa profecía del Apocalipsis: «Signum magnum apparuit in coelo… Y una gran señal apareció en el cielo» [76] [TMJS] (Apoc. XII, 1)

¿Cuál fue el significado del prodigioso milagro? Todos lo reconocieron, incluso en ese momento, como una maravillosa manifestación de Dios, el Creador, una prueba visible de Su existencia y grandeza.

IR A CONTENIDO

i. El Signo de Dios: Triunfo de la Fe.

«Los cielos proclamaron la Gloria de Dios». El milagro fue un deslumbrante espectáculo de radiante belleza. La descripción ofrecida por Madalena de Martel Patricio, una periodista, lo atestigua con elocuencia:

«De cada boca brotó un grito. Miles, de las criaturas de Dios, transportadas por la fe al Cielo, cayeron de rodillas en el suelo empapado…

«La luz se tornó en un hermoso azul como si estuviese filtrada por los vitrales de una catedral y se esparcía sobre la gente, quienes se arrodillaron con las manos extendidas. El azul de disolvió lentamente y la luz parecía filtrarse ahora a través de un cristal amarillo.

«La gente lloraba y rezaba con sus cabezas descubiertas en la presencia del milagro que habían esperado. Los segundos parecieron horas, tan intenso fue aquello.» [77]

Otro testigo simplemente recordó: «Me sentía muy feliz, porque fue muy bello.» [78]

IR A CONTENIDO

«¡Dios es grande!». «¿Qué pensó al momento del milagro?», se le preguntó a Ti Marto, «¿qué pensé?, ¡que eso era el poder de Dios!», «¿y qué piensa ahora?», «pienso lo mismo: ¡qué grande es Dios!» [79] El Signo esperado y observado por todos, fue para todos una impactante manifestación de la Omnipotencia Divina: Dios permitió que viéramos brevemente una pequeña parte de Su Gloria, mostrándonos que El es el Creador del cosmos y su Señor Soberano. En aquel momento, no había más que hacer más que arrodillarse en el lodo, unir las manos y adorarle, y adorar Su Majestad.

Esto es lo que casi todos los peregrinos hicieron espontáneamente. Pero no todos, y la historia nos relata las manifestaciones de justa indignación y escándalo de algunos celosos testigos, confrontados con la inercia estúpida y soberbia de algunas almas rebeldes:

«Encaramado en los escalones del autobús de Torres Novas, un anciano… con gesto gentil y enérgico, recitaba el Credo en voz alta, volteando hacia el sol… Entonces lo vi dirigirse a los de su alrededor, quienes no se despojaron de sus sombreros. Él vehementemente les pidió que se los quitaran ante tal demostración extraordinaria de la existencia de Dios.

«Escenas idénticas ocurrieron en otros lugares. Una señora gritaba y lloraba, como sofocada por la emoción: ¡Qué lástima!, hay tantos hombres que no se descubren ante tal portentoso espectáculo» [80]

Otro testigo reportó:

«Un anciano de barba blanca comenzó a increpar abiertamente a los ateos y los retó para que dijeran que lo que ocurría no era sobrenatural.» [81]

He aquí la prueba de que incluso el más portentoso milagro no puede, por sí mismo, obligar a un alma a tener fe. Debe existir un movimiento en el corazón que responda ante el regalo de la gracia; y la voluntad del hombre, ¡qué terrible misterio!, permanece siempre en libertad de rechazarla. Sin embargo, a la vista del milagro, muchos se convirtieron y nos dejaron sus conmovedores testimonios. En cualquier caso, los incrédulos, incluso según el editor de O Seculo, dejaron Cova da Iria muy intranquilos con sus creencias.

IR A CONTENIDO

La alegría “de los triunfantes”. En cuanto al buen pueblo fiel, ellos dejaron Fátima llenos de alegría, habiendo recibido un inmenso fortalecimiento de su fe por haber visto el Signo de Dios. Despreciados y perseguidos por una minoría de sectarios, ateos y fanáticos [masones], ellos observaron el milagro solar como una maravillosa respuesta de Dios y la Madonna en su favor.

Citemos nuevamente el reporte de O Seculo, el cual es muy instructivo.

«La multitud se dispersó rápidamente sin incidentes, sin desorden o necesidad de la intervención de la policía. Los primeros peregrinos en dejar el lugar fueron aquellos quienes llegaron primero, con sus zapatos sobre la cabeza o colgando de sus bastones. Con sus almas llenas de alegría, esparcieron las buenas nuevas en las villas donde se encontraban algunas personas que no llegaron a la cita.

«¿Y los sacerdotes? Algunos de ellos se mostraron en el lugar, mezclándose con los curiosos espectadores, en lugar de estar con los peregrinos ávidos y deseosos de los favores celestiales. Quizás uno o dos de ellos no ocultaron la satisfacción característica de aquellos a quienes se les refleja en la cara el triunfo…» [82]

¡Pos supuesto!, ¿por qué negarlo?, ¡el milagro de Fátima fue un triunfo de la fe! El triunfo de Dios y el triunfo de María Inmaculada, ¡Su Madre! «después del milagro», dijo el Prof. Ferreira Borges, «la multitud se retiró cantando el Salve Regina, en profundo recogimiento y perfecto orden. Reconocí a algunos feroces sectarios, mirando en silencio y meditabundos…» [83], para ellos, el evento fue el más apremiante, el más convincente llamado a la conversión.

IR A CONTENIDO

Los infieles confundidos. Emulando a Voltaire, Renan escribió:

«Los milagros no se manifiestan cuando deben… Un milagro en París, ante tantos instruidos, ¡pondría fin a tantas dudas! Pero ¡ay!, eso nunca sucederá. Ningún milagro jamás tendrá lugar ante aquellos quienes podrían discutirlo y criticarlo lanzando juicios sobre éste.» [84]

Bueno, ¡sí ha sucedido! En Fátima, Dios parece que deseó ofrecer una impactante respuesta a los retos de Sus negadores: con antelación de tres meses El dio a conocer el lugar, día y hora del milagro. Todos «los expertos competentes» estarían ahí, y después ellos podrían «discutir y criticar juiciosamente sobre el milagro».

Aquellos quienes estuvieron presentes fueron muy cuidadosos en evitar esto. En cuanto a los que no estuvieron presentes, podemos leer sus artículos en la prensa portuguesa de aquel tiempo, y percatarnos de su sombrío desconcierto expresado allí. En el Diario de Noticias del 15 de octubre, los hechos son objetivamente reconocidos, pero previnieron al lector de concluir a favor del milagro, el autor repite la palabra mágica «sugestión», ¡sin otra aclaración o explicación! A Capital exigió una investigación para encontrar «al bromista quien elaboró este atroz truco». Finalmente, todos los heraldos del “librepensamiento” fueron reducidos a unas cuantas variantes de un solo tema: ¡el sol no pudo haber infringido las intocables leyes de la astronomía! A falta de mejor argumento, ellos se contentaron con satirizar el hecho, como se puede observar a continuación: «Lo que realmente nos hace desmayar es que el sol, esa respetable estrella… también tomó parte en la festividad y comenzó a danzar… a pesar de su considerable edad de miles de siglos…» [85], etc., etc.

«En los círculos intelectuales», escribe Barthas, «la controversia se estableció por un artículo de Antonio Sardinha. Jefe de los “integralistas”, movimiento que no mucho tiempo antes se había convertido de la impiedad a la fe, escribiendo en el periódico monárquico A Monarquia.» En un artículo titulado “O Milagre de Fatima” (del 8 de noviembre), él arremete en contra de la mediocridad de los argumentos que se oponen a lo sobrenatural, mostrando la pobreza intelectual de los librepensadores y el “fosilismo” de sus ideas. Nadie respondió a este ataque; «las ranas de la prensa librepensadora cesaron de croar», dijo Costa Brochado [86]. ¿Y desde aquel tiempo? ¡Nada! Al menos nada serio, nada inteligente, nada que agregue algún argumento serio a las vetustas y viciadas negaciones masónicas de 1917.

IR A CONTENIDO

Un milagro en cuatro tiempos. Como el milagro de Lourdes, como el santo Sudario de Turín [87], el prodigio solar de Fátima establece una intervención de Dios en la historia, la cual deja abierta la investigación de la ciencia. También permanece hasta nuestros días la prueba impresionante a favor de la Fe católica.

Nota de B&T: Y como también es el caso extraordinario de la Virgen de Guadalupe, en México.

Pero es seguro decir que nuestra fe no necesita de tales signos. Habiendo sida fundada sólidamente sobre otras bases. Pero desde que innumerables mentes han sido influenciadas por la crítica kantiana, la cual es tan arbitraria como destructiva, se han vuelto también incapaces de reconocer la acción creativa de Dios en el gran libro de la naturaleza, incapaces de reconocer en cada porción de progreso científico una nueva prueba de la soberana inteligencia que ordena el universo, en Su gran misericordia, Dios decidió intervenir de tan extraordinaria manera en nuestra historia, de tal forma que Su acción, siendo visible, directa y tangiblemente, pudiera ser observada científicamente. El prodigio solar de Fátima es un milagro de nuestro tiempo.

Pero también hay un mensaje: es debido a María, su Madre Inmaculada, que Dios realizó este prodigio insólito e incomparable. «Fecit mihi magna qui potens estporque en mí obró grandezas el Poderoso» [TMJS] (Lc. I, 49). Sí, en Fátima a través de ella y por ella es que el Altísimo y Poderoso Señor «mostró el poder de Su brazo», y manifestó Su Gloria. Tal es, por supuesto, el primer propósito del Milagro…

IR A CONTENIDO

ii. El Signo de María: Prueba de sus apariciones, garantía de su mensaje.

«En octubre haré un milagro», declaró soberanamente Nuestra Señora el 13 de julio. Y el 13 de octubre, fue por su gesto eficaz que la maravillosa “danza del sol” comenzó: «Abriendo sus manos», relatan los videntes, «ella las hizo reflejarse en el sol, y mientras se levantaba, su reflejo continuaba proyectándose en el sol.»

Así, fue ella quien prometió este impactante milagro, el cual es la acción indiscutible de la Omnipotencia Divina. Ella lo anunció con tres meses de anticipación, y a su indicación comenzó a manifestarse. En otras palabras, el signo espectacular está indisolublemente ligado con sus apariciones, sus palabras y su mensaje. Es la respuesta de la Reina del Cielo a la insistente solicitud de los humildes pastorcillos: «Me gustaría que nos dijeras quien eres, y realizaras un milagro para que todos crean que eres tu quien se aparece.» La respuesta sobrepasó las expectativas, ya que tal magnitud y esplendor nadie se atrevió a imaginarlos.

Desde entonces, toda duda se ha disipado: Sí, por supuesto fue la Virgen Inmaculada quien cada mes desde el 13 de mayo, vino desde el Cielo a hablarles a tres pequeños pastores, y les transmitió su mensaje. Este milagro, el gran final del ciclo de seis apariciones es, por lo tanto, la prueba indisputable de su autenticidad. Es también la garantía divina de que sus palabras fueron fielmente transmitidas por los videntes escogidos por ella. Y ya que Dios es veraz en todo lo que hace y El no puede realizar un prodigio que ponga en riesgo a Sus fieles, de llevarlos al error. El gran Milagro Solar así aparece ante nosotros como el sello visible, tangible e incontestable que Dios deseó colocar a las apariciones de Fátima, a las profecías, promesas y las terribles advertencias que Su Madre Inmaculada vino a revelar en Cova da Iria. El prodigio solar es la prueba incontestable y quizás. Algo más…

IR A CONTENIDO

iii. Del gran milagro al gran secreto.

¿No es la «danza del sol» el signo sensible, el símbolo de los dos grandes temas del secreto en el que se desarrolla el drama de nuestro siglo?

IR A CONTENIDO

El signo del castigo que se aproxima: un llamado a la conversión. Antes de la misteriosa aurora nocturna del 25 de enero de 1938, ¿no había velado ya el prodigio solar del 13 de octubre «el gran signo» dado por Dios «acerca de que El está próximo a castigar al mundo por sus crímenes», y como Nuestra Señora dijo en su gran secreto?

En cualquier caso, ciertamente tuvo la apariencia de un terrible castigo lanzado por Dios a la humanidad pecadora para persuadirla en su conversión. Unos momentos antes, Nuestra Señora había solicitado con tristeza: «¡Los hombres deben enmendar sus vidas! ¡Ellos deben pedir perdón por sus pecados, ellos no deben ofender más a Nuestro Señor Dios, porque El ya está muy ofendido!»

Incluso antes, los peregrinos sabían acerca de esas palabras, el «Signo del cielo» les hizo entender su significado, que se expresaba en un lenguaje claro y expresivo.

IR A CONTENIDO

Un temor saludable. Por supuesto, fue un terrible momento cuando el sol pareció caer hacia la multitud: «Ellos gritaron: “Oh, Jesús, ¡todos moriremos!, oh, Jesús, ¡todos moriremos!” Otros llamaron a Nuestra Señora para que los salvase y recitaron actos de contrición.» [88] El Padre John Gomes Menitra dijo a John Haffert: «Cuando ví que el sol nos caía, grité: “¡Vamos a morir!… Me arrodillé en los guijarros, uniendo mis manos y pedí perdón al Señor por todos mis pecados”.» [89]

IR A CONTENIDO

Una imagen del fin del mundo. En Alburitel, el terror de la multitud no fue menor. He aquí es testimonio del Padre Inacio Lourenço:

«El sol repentinamente parecía caerse en zigzag, amenazando la tierra. Aterrorizado, corrí y me escondí entre la gente, quienes lloraban y esperaban el fin del mundo en cualquier momento.

«Cerca de nosotros estaba un incrédulo quien había pasado toda la mañana burlándose “de los simplones que habían ido a Fátima sólo para ver a una niña ordinaria”. Ahora él se veía paralizado, sus ojos fijos en el sol, después se puso a temblar de pies a cabeza y levantando sus brazos cayó de rodillas en el barro, llorando e implorando a Nuestra Señora.

«Mientras tanto la gente continuó gritando y llorando, pidiendo a Dios perdón por sus pecados… Todos corrimos hacia las dos capillas de la villa, las cuales pronto estuvieron abarrotadas.» [90]

Mucha gente en Cova da Iria, como en Alburitel, creyó que era el fin del mundo. «No tenía miedo, pero pensé que el mundo se acabaría», declaró José d’ Assunçao [91].

¿No fue el prodigio solar del 13 de octubre uno de los signos que anunciaron la Parusía (la Segunda Venida de Cristo), profetizada por Nuestro Señor en Su gran discurso escatológico? «Y habrá señales en el sol, la luna y las estrellas y, sobre la tierra… porque las potencias de los cielos serán conmovidas.» [TMJS] (Lc. XXI, 25a y 26b). La semejanza es sobrecogedora. Los eventos de Fátima, con su carácter grandioso, sin precedente en toda la historia de la humanidad, indudablemente tuvo una dimensión escatológica que poco a poco [con el paso del tiempo] seremos capaces de ver.

Aunque el prodigio solar quizás marcó el amanecer de los “últimos tiempos”, el prodigio solar no fue el signo de un inminente fin del mundo. Ya que también evoca los otros asuntos importantes del secreto, la revelación del gran designio de Dios para nuestros tiempos, por la mediación del Inmaculado Corazón de María.

IR A CONTENIDO

El signo de la misericordia. «Cuando la gente se dio cuenta que el peligro había pasado», dijo el Padre Lourenço, «hubo una explosión de alegría y todos se unieron en agradecimiento y alabanzas a Nuestra Señora…» [92] Y Mario Godinho agrega: «De las miles de bocas escuché gritos de júbilo y amor a la Santísima Virgen, y entonces creí. Tuve la certeza de no ser víctima de una ilusión, había visto al sol como nunca lo vi después.» [93]

¡No, no fue el fin del mundo! El milagro graciosamente prometido por la Madre de Misericordia no terminaría en un atemorizante cataclismo. Con una gran sabiduría sobrenatural, Ti Marto declaró al Padre Messias Dias Coelho: «No, no tenía ni un poco de miedo. ¡Dios no destruiría al mundo de esa manera!» [94] En vez del temido castigo, los peregrinos tuvieron la feliz sorpresa de encontrarse perfectamente secos, y durante esta última aparición de Nuestra Señora incluso se manifestaron sanaciones milagrosas [95].

IR A CONTENIDO

«La santa visión de la paz». Lejos de haber venido a enjuiciar o a castigar, Nuestra Señora había anunciado ya el 19 de agosto y el 13 de septiembre que en octubre «San José vendría con el niño Jesús a dar paz al mundo, y Nuestra Señora le daría su bendición al pueblo.» Sobre esta atemorizada multitud que pedía por gracias y por perdón, la Sagrada Familia desparramó sus bendiciones desde las alturas del Cielo. Un terrible castigo nos amenaza, ¡eso es seguro! Pero Dios ha tenido un gran designio de misericordia: «El desea establecer en el mundo la devoción al Corazón Inmaculado de María.»

IR A CONTENIDO

iv. Un signo de esperanza: el Corazón Inmaculado de María, salvación del mundo.

«Signum magnum apparuit in coelo, Mulier amicta soleY una gran señal apareció en el cielo: una mujer revestida del sol…» [TMJS] (Ap. XII, 1). El signo del Apocalipsis es un signo de gran esperanza. ¿No fue satisfecho el Fátima el 13 de octubre de 1917, cuando la Virgen Inmaculada apareció en el cielo, «más brillante que el sol»?

Esta es una visión de esperanza y compromiso de inminente victoria. Como la semilla de mostaza en el Evangelio, en 1917 el misterio de Fátima sólo comenzó. Ya que Nuestra Señora hubo prometido que regresaría para tomar nuestra historia entre sus manos, para recordarnos los castigos que nos amenazan, para renovar sus peticiones y para anunciar, con garantía, su victoria final.

El insólito prodigio de la “danza del sol” es el compromiso de su poderosísima mediación. Sí, sus palabras serán cumplidas: «Al final mi Corazón Inmaculado triunfará, el Santo Padre me consagrará Rusia, ésta se convertirá y se le concederá un periodo de paz al mundo.» [Énfasis añadido]

¿Cómo podemos acelerar esta Hora del Reino Universal de los Santos Corazones de Jesús y María? Aplicándonos siempre a «hacer conocer y amar» estos santos y únicos Corazones de Jesús y María, nuestra salvación final.

IR A CONTENIDO

Notas:

[1] O Seculo, October 15, 1917.
[2] The article in O Seculo of October 13 is entitled: “Utterly supernatural! The apparitions of Fatima. Thousands of people go to a moor, around Ourem, to see and hear the Virgin Mary (sic).”
     On the evening of the Miracle of the Sun, the journalist wrote down his account of things, which was published in O Seculo of October 15, under the title: «How the sun danced in broad daylight at Fatima. The apparitions of the Virgin. – What the sign of heaven consists of. – Thousands declare it is a miracle. – War and peace.» Excerpts can be found in De Marchi, p. 199.
     The last article finally appeared on October 29, in Illustraçao Portuguesa, p. 353-356. The title alone sums up the evolution in the journalist’s thought: «The miracle of Fatima. – Letter to somebody seeking an unbiased witness.» Gilbert Renault (alias Colonel Rémy) provides a full translation of this in “Fatima 1917-1957”, p. 142-148.
     The Portuguese review Fatima 50 published a full photocopy of these three documents in its issue of October 13, 1967, p. 6-10; 14-15.
[3] He quotes extremely valuable testimonies in Broteria of May 1951 (p. 511-515].
[4] Meet the Witnesses, Ave Maria Institute, 1961. Barthas gives a few excerpts in Fatima 1917-1968, p. 359-361.
[5] O Milagre da Sol, e o Segrede de Fatima, Porto.
[6] Cf. José Géraldes Freire, The Secret of Fatima, p. 14 (Fatima, 1978].
[7] We will quote all references to the excerpts used, so that the reader can verify for himself the context they are taken from. On the other hand since there are not very many, we will examine all the discordant testimonies, cited by G. de Sede – who performed his own investigation – or quoted by the other enemies of Fatima. We will quote all of them without exception.
[8] O Seculo, October 15.
[9] Avelino de Almeida. Illustraçao Portuguesa.
[10] De Sede, p. 113-114.
[11] Fatima, Unprecedented Miracle, p. 297.
[12] Article of October 29, “Fatima 1917-1957”, G Renault, p. 143.
[13] Quoted by Barthas, Fatima 1917-1968, p. 159.
[14] See for example the conversation reported by Canon Formigao: «What fools we were. Why didn’t we stay in Ourem and have a decent meal there!» (De Marchi, p. 132.)
[15] Our journalist is exact, for Almeida Garrett notes for his part that they arrived shortly after one o’clock (legal time).
[16] O Seculo, October 15.
[17] As we have said, in Portugal there was an hour and a half’s difference between legal time and solar time.
[18] Quoted by De Marchi, p. 132-133.
[19] Cf. Fatima 1917-1968, p. 347, 361.
[20] This text is quoted in extenso in Fatima 1917-1968, p. 343-347, and for the essential in De Marchi, (Fr. Ed.) p. 199-202. Note also that this report is almost contemporary with the event since it was drawn up only two months after, at the request of Canon Formigao, who published it in his first work in 1921.
[21] Fatima 1917-1968, p. 344.
[22] O Seculo, October 15.
[23] Alfredo da Silva Santos, quoted by De Marchi, p. 140.
[24] Fatima 1917-1968, p. 355-356.
[25] O Seculo, October 15.
[26] De Marchi, p. 137.
[27] O Seculo, October 15.
[28] De Marchi, p. 137-138.
[29] De Marchi, p. 135. Again in 1957, to Father Messias Dias Coelho, he declared: «What impressed me the most was being able to stare at the sun.» (Father André Richard, La Reine aux Mains Jointes, p. 96 (La Colombe, 1958.)
[30] O Seculo, October 15.
[31] Maria do Carmo Marques da Cruz Menezes. De Marchi, p. 139.
[32] Quoted by De Marchi, p. 139.
[33] De Marchi, p. 136. “Three times in all, with a duration, each time, of between three to four minutes…” (Correio da Beira of October 30, quoted by Dom Jean-Nesmy, p. 121.)
[34] Barthas, Fatima 1917-1968, p. 358.
[35] De Marchi, p. 138-139.
[36] De Marchi, p. 136.
[37] De Marchi, p. 139.
[38] Fatima 1917-1968, p. 358; De Marchi, p. 135.
[39] De Marchi, p. 141.
[40] De Marchi, p. 138.
[41] De Marchi, p. 135.
[42] De Marchi, p. 140.
[43] De Marchi, p. 141.
[44] Broteria, May 1951, p. 512.
[45] Barthas, Fatima 1917-1968, p. 353.
[46] Ibid., p. 358, 360, 361.
[47] De Marchi, p. 136.
[48] Cited by J. Castelbranco, Le Prodige Inouï De Fatima, p. 54. It is found on p. 50 of the translation More About Fatima.
[49] Barthas, Fatima 1917-1968, p. 153.
[50] Barthas, p. 357-358. See also the testimony of Dominic Reis, given to John Haffert, Barthas, p. 361.
[51] De Marchi, p. 139.
[52] Quoted by Dom Jean-Nesmy, p. 120.
[53] De Marchi, p. 140. It was he who composed, later on, the verses of the Fatima Ave.
[54] De Marchi, p. 141.
[55] Illustraçao Portuguesa, October 29.
[56] De Marchi, p. 139.
[57] Illustraçao Portuguesa, October 29. Gilbert Renault, p. 143.
[58] Fatima, Great Miracle of the Twentieth Century, p. 329.
[58a) Loc. cit.
[59] Le Monde, May 11, 1967. It seems H. Fesquet has not read anything at all on Fatima except the article by Father Jacquemet in Catholicisme, Col. 1112-1115. It is regrettable that a learned encyclopaedia, which in some other places is useful, presents such a defective article despite its appearance of objectivity: «The purity of the Catholic faith does not require that northern people experience the same vibrations as those of the south when reading accounts of this nature, whatever might be the exact nature of the phenomenon described.»
     Besides his hypocrisy, this phrase alone abases our author to the level of the rationalist of the Documentation antireligieuse which contented itself with saying: «The Portuguese are a merry bunch.» This is absurd.
[60] Masson, 1973.
[61] P. 50.
[62] Page VIII. In the preface the author sums up all the conclusions of his thesis.
[63] P. 51.
[64] We will show in an appendix how the origin of this myth goes back to this clever popularizer, and his fantastic work which enjoyed a huge success: The Psychology of the Crowds, Alcan, 1896.
[65] P. 117.
[66] Fatima 1917-1968, p. 352.
[67] P. 119.
[68] We read, for example, from the pen of Avelino de Almeida: «Some pious people continue to hope that the Virgin Mary… in Her goodness, will even go so far as to tell them when a peace treaty wilt be signed.» And earlier on: «Our Lady announces to the faithful that on October 13 – that is, today – She will tell the real reason for Her visits, and by Her heavenly apparition console those who are in the state of grace (sic).» O Seculo, October 13, 1917.
[69] We will return to this disputed point in an appendix.
[70] Maria Augusta Saraiva Vieira de Campos, who drew up a detailed account of her voyage in October 1917. Dom Jean-Nesmy, p. 120.
[71] P. 110.
[72] On this eminent role of Metaphysics, «this highpoint of natural wisdom», see the study of our Father: «Metaphysics, judge of science and religion» (CRC no. 170, October 1981, p. 3-7].
[73] Cf. Avelino de Almeida, article of October 29.
[74] Le Monde, May 11, 1967.
[75] Documentos, p. 519.
[76] On the expression employed by the crowd, see O Seculo, October 15.
[77] De Marchi, (Orig.) p. 198.
[78] Joachim Pereira dos Reis, Fatima 1917-1968, p. 352.
[79] Interview with Father Messias Dias Coelho, in January, 1957. Three weeks later, the old man returned to his God. Quoted by A. Richard, La Reine aux Mains Jointes, p. 96.
[80] O Seculo, October 15.
[81] De Marchi, p. 140.
[82] O Seculo, October 15.
[83] Fatima 1917-1968, p. 357.
[84] Les Apôtres, p. XLIII.
[85] Fatima 1917-1968. “The Portuguese Press and the Apparitions”, p. 163-175.
[86] P. 175.
[87] Cf. The Holy Shroud, Proof of the Death and Resurrection of Christ, by Brother Bruno Bonnet-Eymard, member of the scientific congresses of Turin [1978] and Bologna [1981]. (Maison Saint-Joseph).
[88] Maria Carreira, De Marchi, p. 136.
[89] Fatima 1917-1968, p. 360.
[90] De Marchi, p. 141.
[91] La Reine aux Mains Jointes, p. 97.
[92] De Marchi, p. 141.
[93] Statement to John Haffert, quoted in Fatima 1917-1968, p. 361.
[94] La Reine aux Mains Jointes, p. 96.
[95] These will be described at length as we retrace the history of the pilgrimage. Cf. Michel Agnellet, Miracles at Fatima, p. 125-133. Ed. Trévise, 1958.
IR A CONTENIDO

Traducción de Alejandro Villarreal de bibliaytradicion.wordpress.com

SOBRE la REPRODUCCIÓN del CONTENIDO de B&T: Se concede el permiso para reproducir, total o parcialmente, las traducciones originales de este blog, en otras páginas o blogs, con la condición de mencionar el origen del mismo, así como a su autor original y el nombre del traductor. El autor de B&T hace lo correspondiente al tomar material de otras páginas, sin excepción, y a pesar de no concordar totalmente con las ideas de otras webs o autores, creyendo que en esto reside un simple pero no despreciable acto de honestidad.


Respuestas

  1. @ Alexander.

    Dear Alexander: It is no coincidence that what the Fatima children saw is now quite a scientific possibility, inasmuch as, according to NASA, the sun is entering a historical phase wherein solar storms and flares are reaching distances every time more lengthy, so that the trend today shows that eventually those flares will indeed not only reach Earth but sourround it so as to incinerate it, much like those human individual instances of spontaneous combustion.

  2. Con el milagro del sol quedaron perfectamente autentificadas las apariciones de Fàtima, que ademàs fueron cubiertas por la prensa de acuerdo a la tecnologia de 1917, y fuè tal su difusiòn que hasta Holywood a su estilo, filmò una pelicula via Warner Brother en 1952. titulada «El milagro de Nuestra Señora de Fatima» protagonizada por Gilbert Roland y Angela Clark, pelicula, que por cierto yo poseo en DVD, y a decir verdad en lo general esta pelicula està perfectamente apegada a la historia, pues hay una escena, en la que dentro de la carcel, los niños rezan el Santo Rosario, lo cual de no conocerse la historia real podria interpretarse como una ficciòn

    • No conozco la película, pero no me extrañaría que esté bien hecha. Es difícil imaginar, por los bodrios actuales, que alguna vez hubieron producciones cinematográficas (varias) que quisieron reflejar fielmente pasajes de la historia de la Iglesia.

    • @ Alexander. The movie is really very good. Well done. You should buy a DVD.

  3. Alejandro.- Si Ud, me envia su direcciòn a mi correo electronico, yo le envio por correo una copia de la pelicula,

    • Aprovechando y la subiría al blog. Muchas gracias.

    • @ Andy and Alex. Bravo!

  4. todas estas cosas son una vil mentira. no se crean de nada. cuando uno de estos bandidos que ponen esta informacion aqui en la web a la menor senal de una simple gripe a quien acuden. HIPOCRITAS acuden a la sciencia. por que entonces no acuden a sus milagritos (por que saben que nada de eso es cierto). por que es que todos los milagros pasas a kilometros de ti pero nunca te pasan a ti? TAL VEZ POR QUE NADA DE ESO ES CIERTO.

    • Sr. o Sra. «Ramhz»:
      +
      Los hechos del 13 de octubre en Cova da Iria, como dice este artículo, están suficientemente documentados por periodistas anticatólicos que eran afines al gobierno masón y anticlerical de Portugal, en ese tiempo. Y como dice también el artículo, muchos testigos fueron ateos materialistas quienes no tuvieron más opción que contar lo que vieron sus sorprendidos ojos. No importa cuántos milagros pueda realizar Dios para los hombres, como también reflexiona este escrito, el hecho es que siempre habrá ciegos y duros de corazón que crean primero a sus prejuicios y sean fieles a sus torcidas creencias, que a lo que pudiese decir la historia, en primera instancia, y a lo que dice la teología en última instancia; su negación, aunque comprensible, es irracional, dados los testimonios que nos quedan de tal evento extraordinario.

    • @ Ramsés. Ponte a leer el libro egipcio de los muertos porque es el que conviene a tu alma muerta.

      • POR FAVOR!!!!!! no te andes con esos chistesitos (por no decir otra cosa) cuestiona lo que crees (haste el favor a ti mismo(a). al menos que lo sepas y lo que tienes aqui es tu negocito. no tengo nada encontra de los creyentes pues creen por que asi los han estupefacido desde el inicio. estoy en contra de los endoctrinadores hijos de los espanoles que solo nos vinieron a partir la mamacita aqui a nuestra tierra y nos hicieron creer en cosas que no.

        • Sr: «Ramhz»:
          +
          No puedo más que sentir cierta conmiseración ante lo que Ud. expresa, conmiseración porque Ud., como miles de mexicanos, es víctima, primero de su ignorancia, porque aunque existe la propaganda liberal, y muy agresiva en México, sólo es efectiva con quienes no se molestan en abrir un libro y se entretienen con la televisión la mayor parte del día (o trabajan como burros todo el día, no tengo empacho en reconocerlo). ¿Qué podíamos esperar de más de 150 años de gobiernos liberales (desde Juárez) que han empobrecido al país?, sino sólo evadir su responsabilidad culpando a otros –léase culpando a la Iglesia y a los españoles-. Sr., ¡despierte Ud.!, México fue empobrecido por los «redentores liberales». ¿quiere una lista de los presidentes (desde los priístas hasta Juárez) y sus filiaciones políticas e ideológicas?, ¿quiere saber quién ha regalado la industria minera mexicana a Canadá y Estados Unidos (hasta la actualidad), entre otros turbios negocios?, ¿quiere saber quién ha empobrecido al campo mexicano?, ¿quién relegó la industria? ¿No quiere saberlo?, mejor siga viendo Univisión, las telenovelas insulsas y los «talk shows» (y los partidos de la mediocre selección mexicana de fútbol), porque de historia ha demostrado tener muy poca idea y aún menos voluntad para vencer su ignorancia. P. D.: Mi trabajo es este blog lo hago sin recibir o pedir un centavo, porque amo a la única Iglesia que fundó Jesucristo, y amo a su Madre, nuestra Madre del Cielo, precisamente porque sé cuánto ha sido odiada la Iglesia (y por lo tanto Jesucristo) en México y cuánto han envenenado a los mexicanos con mentiras anticlericales. Si Ud. es mexicano, no puede «hacerse de la vista gorda» ante los cristeros (como lo ha hecho con Fátima), ¡aprenda de ellos a ser mexicano y católico! y no a ser un simple «chicano» que repite como loro lo que ningún historiador serio afirmaría. ¿Qué sabe Ud. sobre ser «creyente»?

        • GRANDIOSO, HASTA QUE HAY ALGUIEN QUE RESPONDE!!!!!!
          te accepto tu respuesta aunque no tienes de que convencerme acerca de los goviernos corruptos amafiados con la iglesia catolica.
          pero si te accepto respuestas a las siguientes preguntas.
          1. que hay de la corona de la virgen. 2 que hay de los colores de la bandera en el agelito de la virgen. (dios respeta fronteras politicas) 3 danos en la pintura que no era pintura celestial? 4. inconsistencias en la rigidez del manto. 5 guadalupe de espana o mexico. me immagino que si sabes que la de mexico es immitacion. la original guadalupe esta en espana. 6 tienes pruebas de que existio juan diego? digo en algo tienes que basar tu fe. o solo por obediencia? alguna vez has echo preguntas acerca de tu religion? o te lo prohiben por fe? o sera pecado? perdon el sarcasmo pero es demaciado facil como para no hacerlo.

        • Sr. «Ramhz»:
          +
          En primerísimo lugar, los católicos basamos nuestra fe en la resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, Mesías esperado hace 2 mil años. En segundo lugar, sus «observaciones» sobre la aparición de la Virgen de Guadalupe, para no variar, son totalmente insulsas:
          +
          1. La corona tiene referencias escritas de descripciones del tiempo (s. XVI), y en algunas copias al Ayate de Juan Diego con la imagen de la Virgen, de diversas épocas (siglos XVI-XVIII) algunas incluyen una corona, otras forman la corona con los rayos de luz a la espalda de la Virgen y que pasan sobre su cabeza y otras imágenes no incluyen corona y no existe una composición de una corona con los rayos de luz. De esta manera, esta corona bien pudo ser o un añadido a la imagen original (y portentosa), pero que nada le quita a las características extraordinarias de la imagen principal. En otras palabras, el añadido no es prueba, en absoluto, de que la imagen tenga origen humano, al contrario, la imagen principal y los añadidos son distinguibles por lo burdos de unos y lo extraordinario de la imagen general. (http://www.luxdomini.com/_gpe/contenido1/guadalupe_corona.htm)
          +
          2. El ángel también es un añadido (https://bibliaytradicion.wordpress.com/inquisicion/las-maravillas-de-la-virgen-de-guadalupe/#6), nadie lo niega, pero como mencioné, aunque las razones por las que se hicieron éstos podrían ser múltiples y desconocidos, pues no existe registro, es un hecho que éstos sirven hoy para comparar los rastros de la mano humana, con la imagen extraordinaria:
          +
          Philip Serna Callahan y Jody Brant Smith pudieron fotografiar la imagen de la Virgen de Guadalupe el 7 de mayo de 1979 sin la protección del cristal. Tomaron 75 fotografías, 40 de las cuales con rayos infrarrojos; lo hicieron con películas normales y con películas especiales para rayos infrarrojos. Este estudio de fotografías con rayos infrarrojos es indispensable en el estudio de cualquier trabajo artístico, pues con los rayos infrarrojos se puede determinar la presencia de pintura sobreañadida y ver las distintas capas de pintura. Por ello, antes de emprender cualquier trabajo de restauración o limpieza de pinturas antiguas, se recomienda hacer fotografías con rayos infrarrojos… Lo realmente original es el manto azul de la Virgen que es tan brillante que parece haber sido pintado unos días antes. El azul del manto es original y es de un pigmento transparente y desconocido. Es inexplicable, sobre todo, por su densidad, brillantez y no estar descolorido después de tantos años. En cuanto a la túnica o vestido de la Virgen, resalta su extraordinaria luminosidad. Refleja en alto grado la radiación visible y, sin embargo, es transparente a los rayos infrarrojos. En cuanto al pigmento rosa de la túnica, parece igualmente inexplicable. La túnica y el manto son tan brillantes y coloridos como si acabaran de ser pintados. La cabeza de la Virgen es una de las grandes obras maestras de expresión artística facial. Por la finura de su forma, la sencillez de la ejecución, el matiz, el colorido, existen pocos casos que la igualan entre las obras maestras del mundo. Las aproximaciones fotográficas con luz infrarroja, no demuestran plaste o aparejo de ninguna especie, característica ésta que por sí misma hace de la imagen algo fantástico, ya que ningún pintor del mundo pinta antes de haber preparado previamente la tela en que va a pintar. El tono del cutis del rostro y de las manos es definitivamente indio y, a una distancia de un metro, aproximadamente, parece tener un tinte casi verde grisáceo (oliva). Examinados de cerca con una lente de aumento, los pigmentos parecen variar del gris en las sombras profundas al blanco brillante en la zona más clara de la mejilla
          Fin de cita. En fin en el link sigue la descripción de tan extraordinaria imagen.
          +
          3. No entiendo bien su redacción del número (3), pero por supuesto que es celestial. Ud. como muchos anticatólicos pretenden sacar conclusiones apresuradas a partir de unos cuantos hechos (los añadidos), que nadie niega, pero es innegable también que el resto de la imagen es algo nunca visto, incluídos los ojos (https://bibliaytradicion.wordpress.com/inquisicion/las-maravillas-en-los-ojos-de-maria/)
          +
          4. No entiendo tampoco cúal sea su punto en (4). Pero también han habido muchos análisis a éste que corroboran que está hecho de Ixtle o Ixcle y que su burda superficie no fue preparada en forma alguna para recibir una «pintura». Los opositores modernos, léase revista Proceso y Sol Rosales es otro asunto de dimes y diretes, pues nadie conoce sus análisis, nadie ha comprobado sus resultados y sus procedimientos, de esta forma, lo que han dicho sólo llega a chisme de pasquín.
          +
          5. El nombre Guadalupe se dice que es adaptación o castellanización del término náhuatl «coatlaxopeuh» o la que aplasta la serpiente (en referencia a un pasaje del Apocalipsis) y que los españoles tan sólo se acomodaron a decir Guadalupe. Este caso es como muchísimos que ocurrieron con la «deformación» en la pronunciación indígena original: Cuauhnahuac=Cuernavaca. En cuanto a una similaridad con alguna otra imagen, es totalmente arbitrario y parte de los fuegos de artificio que suelen realizar los opositores anticatólicos. En la siguiente página puede ver un análisis sobre el tema, así como imágenes: http://www.luxdomini.com/_gpe/contenido1/guadalupe_guadalupanas.htm
          +
          6. Por supuesto. Existe un documento «Las Informaciones Jurídicas de 1666» donde, a pesar de haber pasado tanto tiempo desde la aparición, ya se había caído en la cuenta de que era necesario un documento que diera testimonio, no sólo de Juan Diego, sino de los acontecimientos que sucedieron alrededor de la aparición. Nuevamente le remito el excelente sitio de Jesús Hernández, quien ha recabado gran cantidad de información, entre otros temas, de la aparición en el Tepeyac: (http://www.luxdomini.com/_gpe/contenido1/guadalupe_1666.htm) y (http://www.luxdomini.com/_gpe/contenido1/guadalupe_informaciones.htm). Por otro lado, todavía no se conoce si existen más documentos de este tipo, pues el acervo documental es muy grande y está sin clasificar, de tal manera que no se sabe lo que se tiene.
          +
          ¿Amafiados con la Iglesia?, ¿con quién?, ¿con los masones liberales Juárez, Nepomuceno, Lerdo de Tejada o con los tiranos anticatólicos Huerta, Carranza, Obregón, Calles o con todos los populistas de izquierda que dieron vida al monstruo priísta, comenzando por Cárdenas y acabando con el masón Zedillo, quienes fomentaron la educación antirreligiosa y cientificista (no científica, ojo)? Mejor póngase a estudiar, la historia de México, en su mayor parte, es la historia de la persecución a la Iglesia en México, que no ha cesado.

        • En otra ocacion me hubiera dado lastima Que lavada de cerebral te Han dado. Pero veo Que no eres nada tonto. Todo lo contrario tu eres el Que dia a dia eres el estupefaciente de mucho. Ojala te pudras en el infierno lastima Que Tampoco eso existe, de lo contrario pediria Que te fueras ahi. Pero eso tu bien lo sabes. Ojala le laven el cerebro asi a toda tu desensendencia aunque lleguen a ser una carga para el govierno. Menor no ojala Que te arrepientAs del dano Que haces y lo repares

        • Sr. «Ramhz»:
          +
          La lástima es toda mía (como se lo dije antes). Finalmente se quita la máscara y sólo queda la persona frustrada (y envenenada) con odio y prejuicios, desafortunadamente para Ud., eso dista mucho de ser un argumento (ad hominem). Yo le deseo que Dios que quite la venda de sus ojos, porque ya sea siendo ateo, agnóstico, judío o protestante, o cualquier otra posición que haya derivado en anticatolicismo, sólo lo llevarán a un triste final.
          +
          P. D.: Gobierno es con «b».

        • te hago una confesion? sabes gracias a quien soy ateo? a un par de sacerdotes catolicos! despues de obtener mi BS en la universidad platicando con ellos acerca de inconsistencias en la biblia, inconsistencias en la religion, preguntas como las que te plantee en mi previo post ellos si que se quitaron la mascara y dijeron la verdad. LA RELIGION FUE FUNDADA PARA APLACAR Y CONTROLAR A LAS MASAS. en ese entonces comprendi por que sus predicas de estos heroes del catolicismo eran tan diferentes a los demas. ellos abogan por la educacion, por la planificacion financiera y familiar, muy differente a la ‘ten los hijos que dios te de» y «que se haga lo que dios quiera». tu sabes me immagino que vas a tener que sostener tu pocision por que seria muy dificil dejar el negocio y te comprendo para mi fue muy dificil. pero al final tu y toda la bola de obispos, curas catequistas igual como fui yo caeras en manos de ateos en un hospital. y ahi te brindaremos con gusto los adelantos de la sciencia. y lo que menos pasara es que tu diosito te de el milagro de tu salud! no me alegra pero hasta entonces la gente questiona lo que devio haber questionado desde el principio de la mentira

        • Sr. «Ramhz»:
          +
          Usted trae a cuento la misma tontería que ponen de pretexto los protestantes «antes yo era católico… bla, bla bla». Con lo que me dice sólo se comprueba lo mismo que se comprueba con los protestantes mencionados, que cuando supuestamente eran «católicos», eran mediocres e ignorantes (con la diferencia que muchos, una vez abandonado su «catolicismo», siguen siendo mediocres intelectuales e ignorantes, pero además maliciosos), tan mediocres que no se molestaron en comparar lo que uno y otros les dicen sobre el catolicismo (creerse los «muñecos de paja»), eso, señor, se llama caer en falacias y no crea que lo digo porque no crea que exista esa calaña de «sacerdotes», sino porque finalmente esas personas también son ignorantes, son malvados porque se escudan en un oficio en el que no creen ni tienen la menor vocación, son, por decir lo menos, un cáncer. Así como Ud. pone tan lamentables ejemplos, yo le puedo poner otros de excelentes sacerdotes que conocen la historia, la filosofía y la teología [verdaderos, y no chismes de revista izquierdosa], y ejercen su ministerio como debe ser. El hecho de que usted crea que puede influir con semejantes «argumentos», tan sólo me confirma también que no tiene la menor idea de nada, la historia de la humanidad está más allá de las opiniones de algunos pusilánimes, y mi fe, señor, como le comenté es en Jesucristo, verdadero y único Mesías que ya vino hace dos mil años y quien fundó la única Iglesia y fuera de ella no hay salvación, la historia de la humanidad tan sólo confirma lo anterior, si Ud. quiere hundirse en chismes, allá Ud., pero no piense que todos somos igual de ingenuos o maliciosos que Ud. Cualquier verdadero católico sabe distinguir, sobre todo en estos tiempos, entre buenos y malos hombres de la Iglesia, pero no por eso se atribuirá juicios que no le corresponden ni se dejará envilecer por quienes tienen podrido el corazón.
          +
          P. D.: Si no fuese tan ingenuo Ud., no trataría de plagiar tan burdamente las teorías marxistas. Ahora cuénteme una de vaqueros.

        • Bueno pues ya que tratas de hablar como intelectual (digo eso es lo que creo que tratas de decir puesto que tu argumento esta un poco eliptico como todos los de las iglesias y mentirosos) dejame ver si te llego a la talla.

          1. Yo nunca te argumente que mi ateismo fue inculcado en la que dijeron esos sacerdotes. Todo lo contrario mi ateismo esta fundado en la unica y recalco unica prueba de que tu dios hasta el dia de hoy no se ha mostrado. y como se comprueba esto? facil dame una prueba de tu dios. por favor no me vengas con lucecitas del sol y todo eso que tienes en tu pagina. tu sabes muy bien que hay una explicacion cientifica para todo eso. si usted quiere creer en magia tambien vaya a un circo!

          2. hablas de desenmascararse! pues bien dinos tu. quien es Alejandro Villareal? a que se dedica? tu oficio? carrera? pero sabes no me importa mucho lo de ti. que tal tus seguidores? tu circulo social? cuantos de tus dicupulos han alcanzado un nivel universitario gracias a tu influencia? cuantos han quedado produciendo la mano de obra barata del futuro trayendo a los hijos «que dios les de» «haciendo lo que dios quiere» el tipico conformismo de un catolico. (puedes acaso negar que es muy facil adivinar las caracteristicas de un catolico, cristiano, o x religion)

          3 tal vez este no sea un punto diferente al anterior pero vale la pena por si no lo leiste. adivina quien es la siguiente persona.
          * no llego a la preparatoria (se quedo de pobretonto o protestate.) jajajaja
          * tiene 5 hijos y sueldo para solo la mitad de uno.jajajajaj
          * basa sus creencias en la Fe (que a huevo hay que creer sin evidencia)jajaja
          * tiene un panteon mas grande que los romanos (santos virgenes etc)jajajaj
          * no solo le compra gasolina y petroleo a los paises del medio oriente sino que tambien a un dios (y cuando va a tierra «santa» le muestran munequitos y un «dicen que aqui fue»)jajajjajajjajajajajajaj
          * se cree el cuentito que en cada pais tercermundista aparecio la mama de tata dios. jajajjaajjajajajaj
          *no tiene para pagar utiles escolares de sus hijos pero si para la cantina.jaja
          * como tu dices una bola de analfabetas por feligreses,
          * y nunca cuestionan su Fe por que si lo hacen dependiendo de la historia y no creo que lo nieges por que no vas a poder.
          1. les arrestan
          2. los queman
          3. les excomulgan.
          4. les llaman protestantes.
          y pues como me immagino que eres una persona estudiada (jajaja) podras agregarle mas a mi lista (no digas que no).

          4 cual es la diferencia entre tu y yo.
          A. yo luche mucho para tener el poco estudio que tengo (tienes mucha razon es casi nada)
          B. yo no creo en nada que no se pueda comprobar y dejo muy a la deriva milagritos que pudieron pasar por coincidencia. porque? si es que en realidad hay un dios entonces quisiera que fuera mas fregon que milagritos de sol.
          C. me resulta dificil. te lo confieso, muy dificil que haya un dios que te de un set de mandatos (digo leyendo bien el pasaje de los mandamientos ni siquiera son 10 y tu muy bien sabes de lo que hablo. adivina cuantos.) que los tienes que cumplir a fuerzas, y que si no pues te vas derechito a un infierno (que no dios esta en todas partes? bueno solo para cosquillear tu cerebro tantito) donde el sufrimiento esta 24 horas al dia por una eternidad. pero que sin embargo te ama. wow verdad que ni tu te la crees?
          D. me esfuerzo diario en llevar un codigo de etica a lo mejor que pueda ser.
          *no le miento a nadie al menos que sea nesesario. claro eso nunca lo entenderias o si?
          * trato a lo que mas pueda de trabajar por lo que me pagan.
          * fijate que no discrimino cuando las personas que llegan al hospital se estan muriendo en que si son catolicas o protestantes o judios ohippies (pero si me daria miedo llegar a verte a ti como mi doctor)

          5. dime algo bueno que se le atribuya a la iglesia catolica o cualquier iglesia del mundo y te dire minimo 50 crimenes que haya cometido quieres empezar. tu solo dime cuando!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

          6. lo de la virgen de guadalupe es imposible argumentar contigo nunca enfrentas el argumento. me mandas a leer propaganda que capaz tu nunca la haz leido.
          * la coronita. me dices que alguien se la anadio? tu le anadirias algo a la foto de tu mama y la pondrias en tu sala? y por que el reclamo no fue a la pintura?
          * me dices que es una pintura magica, que rayos ultravioleta, etc. etc. etc. no mi alex. no nos hagamos huajes aqui. de lejos en cualquier foto puedes apreciar que esta super mal pintada. postea una foto y yo mismo que no soy ningun ingeniero de la NASA te puedo hacer preguntas de tu fotito. pon la actual, la que esta en circulacion ahorita por que parace que hay varias verdad?
          * acaso crees tu que soy cualquier analfabeta de tu rebano que me vinieron a lavar el cerebro uno de tantos sacerdotes catolicos. no mi alex. conmigo te encuentras. a mi no me convence tu show. tu si te fuiste de paseo a la france. muy bien te felicito. pero no cuentes esas hitorias de duendes que todas suenan igual. y las profecias. donde esta la convercion de rusia? los curitas de ese entonces nunca se immaginaron del internet!!!! pero les quedo el ojo cuadrado. los rusos no son nada mensos? sabes cual es el nivel de educacion en Rusia? te daria lastima si es que tienes hijos o hijas? digo no se si te interesa la educacion.
          * tu sabes por que en USA la virgen no se aparece asi como los cuentos infantiles de mexico (la clasica choza y la virgenciata, y que se quema la choza y la virgencita por arte de magia no le paso nada todos vengan a dar sus limosnas. jajajajjajaja)? por que no tiene papeles jajajajajajaja
          * cuando postees el retrato de tu mami (la virgen) me dices para hacerte unas preguntitas. (algo me dice que nunca lo haras y me invitaras a tener FE)jajajajaja

          Bueno ya basta de tantas risas.

          P.D. no te burles de mi ortografia por favor!!!!! disculpa el espanol lo deje en segundo termino si no le entiendes te lo puedo escribir en ingles! pero por favor, en serio, de verdad responde al argumento ya que te siento un poco irritado en tus contestaciones. jajajajaj OK te prometi ya no reirme de ti y como no espero ninguna contestacion tuya. pues entonces que te vaya bien. ojala que algun dia lleges a cuestionar tu fe y veas el mal que le estas haciendo a tanta gente.

          Good Bye

        • Sr. «Ramh»:
          +
          En pocas palabras, su argumento es un «muñeco de paja». Le refiero la definición por si no la sabe: «A straw man is a component of an argument and is an informal fallacy based on misrepresentation of an opponent’s position, twisting his words or by means of [false] assumptions . To «attack a straw man» is to create the illusion of having refuted a proposition by replacing it with a superficially similar yet unequivalent proposition (the «straw man»), and refuting it, without ever having actually refuted the original position. Generally, the straw man is a highly exaggerated or over-simplified version of the opponent’s original statement, which has been distorted to the point of absurdity. This exaggerated or distorted statement is thus easily argued against, but is a misrepresentation of the opponent’s actual statement.«.
          +
          En conclusión, no tiene la menor idea de lo que es religión, catolicismo, ciencia o historia. Lo único que hace Ud. es fabricarse un mito de todo ello y conforme a ese mito, se siente capacitado para «refutarlo» (refutar sus fobias mediante sus filias). Su nuevo ardid es la «ciencia» o mejor dicho el cientificismo (creer que la ciencia todo lo sabe y todo lo puede), pero lo que Ud. no podrá hacer es citar la «ciencia» que apoye sus prejuicios, por la sencilla razón que ninguna ciencia de la naturaleza tiene por objeto el estudio de Dios, para ello Ud. deberá recurrir a otra ciencia, la teología. Me adelanto a sus replicas: 1. Ciencia simplemente hace referencia al saber organizado, de esta manera, existen ciencias fuera del ámbito natural. 2. El hecho que existan científicos ateos y a veces muy intransigentes, no quiere decir que su posición se funde en alguna ciencia natural, la mayoría de las veces es un prejuicio y evidencia lo mismo que le digo a Ud., son verdaderos analfabetos cuando se trata de esas materias.
          +
          El hecho de que a usted le parezca «intelectual» este diálogo (por lo que respecta a una de las partes, por lo menos), es síntoma de que Ud. no toma en serio ni sus propios argumentos, en palabras simples, Ud. se dedica a «picarle la cresta» a la gente, a «tirar la piedra y esconder la mano», bueno, ahí lo tiene, esa es su seriedad. Cuando yo dejé de ser niño dejé también de dialogar como uno. Cuando deje su actitud de colegiala, riéndose de todo (pues como sarcasmo ni siquiera es ingenioso), posiblemente aprenderá algo.
          +
          P. D.: No me burlo de nadie, ni de su ortografía, bien sé que su error puede deberse que en inglés se escribe con «v», y una corrección (¡una más!) no le hará daño, ¿o si? Tampoco pasaré sus otros 10 comentarios en los que se dedica, de forma tan pueril, a ¡burlarse! de los lectores, el asunto es conmigo no sea tan cobarde, y por cierto, ahí también comete faltas de ortografía, lo cual, no es una burla, nada más una observación.

        • Me olvidaba el vídeo en el que cree con fe tan ciega, del anticatólico Dawkins, es una tomadura de pelo y es un ejemplo de un científico que puede ser muy competente en las ciencias naturales pero es un analfabeta cuando se trata de historia o de filosofía. ¿Ya cuestionó Ud. si lo que dice ese señor es cierto?, ¿no? Ahí lo tiene, ¿ya ve que los ateos son más ingenuos de lo que pensaban?

        • @ Alex. Este Ramsés debe ser Pobretonto… ¡perdón!… Protestante.

  5. @ Ramsés. No cabe duda que estamos en La Era del Burro.

  6. No entiendo porqué todavía y pese a los avances de la Ciencia y de la Razón se sigue creyendo en Fátima como una aparición religiosa. En Cova de Iría se produjeron unos fenómenos muy relacionados con una desconocida tecnología, con unos «discos» brillantes que evolucionaron sobre las cabezas de la multitud, que lanzaban haces de luz y calor y al finar retornaron al espacio. Crean lo que quieran los integristas, pero lo que ocurrió allí nada tiene que ver con la religión y sí con unos fenómenos aéreos que se repiten en muchos lugares del mundo.

    • Los «integristas» creemos en las apariciones de la Virgen María, porque no es la única ocasión en que lo hizo, además este milagro fue anunciado mucho tiempo antes de que sucediera, este no es un asunto de acomodar «fenómenos» raros aéreos con la religión. ¿Por qué no muestra alguna grabación o tratado científico sobre esos «fenómenos aéreos» que dice? Lo que Ud. y otros tantos pasan tan fácil por alto, es que allí estuvieron detractores de la religión, hombres de ciencia, quienes no tuvieron otra explicación más que lo extraordinario y por supuesto, que nada habían visto así en su vida. Pero bueno, algunos quieren tapar el sol con un dedo y escudarse en la falacia fe vs. ciencia, aquí lo único que se opone a la fe, es el cientificismo. Seguramente los marcianos nos jugaron una broma, o los venusinos o quien sea, total, si recurrimos a la licencia literaria y no a los hechos, podemos citar a los pitufos también.

  7. Tiempo ha que intente descubrir la verdad, sobre este acontecimiento histórico. Vivimos en una época de dicotomía donde no se busca la verdad, y en cambio si hay mucho prejuicio. Hay verdad en gente atea pero honesta, que vive ayudando a los demas. Pero como son gente de «izquierdas», muchos de «derechas» no quieren ver esa verdad. A la par, hay mucha gente de «izquierdas» que no quieren oir nada relacionado con la religión, y ni siquiera ven la labor de Cáritas.

    Antiguamente había una guerra entre ciencia y fe, pero hoy lo que existe es una guerra ideológica-política.

    Repito, detesto los prejuicios, y siempre estoy interesado en la verdad, y en la ayuda mutua.

    Esta fue mi ardua investigación (lo más objetiva posible) sobre el milagro del Sol. A pesar de ser un trabajo notable, dudo que haga cambiar de postura a nadie.

    http://renovablessinlimites.blogspot.com.es/2012/05/diez-predicciones-para-antes-de-2030_28.html

    • Interesante su artículo, pues creo que los ateos o los escépticos en la mayoría de los casos siempre dejan de considerar los detalles históricos del milagro de Fátima y por ello lo pretenden descartar de un plumazo. Incluso la incredulidad se da al interior de la Iglesia, sin embargo, debe recordarse que este milagro fue repetido en el Vaticano en 1950 en exclusiva para el papa Pío XII, algo que se reportó en la revista Times por boca del Card. Tedeschini (en este otro post incluí una crestomatía de la TV italiana donde se habla del asunto: bibliaytradicion.wordpress.com/inquisicion/el-milagro-del-sol-en-fatima/). Creo que vivimos una época de poca honestidad intelectual (me parece injusto e infundado pensar en automático que los hombres de otras épocas eran más tontos o más crédulos que los actuales), si hoy se repitiera el Milagro de Fátima creo que habrían pocos que le dieran crédito a sus ojos, pensando en toda clase de evasivas para negar a Dios, e incluso recurriendo a teorías de OVNIS; el milagro que se prometió en Garabandal, por lo que se ha dicho, será más espectacular, perdurará hasta el final de los tiempos, pero aún así seguirá el plan de los hombres inicuos contra la obra de Dios. No es poca cosa la fe, sobre todo en una época llena de simulaciones y apariencias que tienden a combatirla.

  8. Hola Alejandro

    Cuando hace un año me contestaste, e hiciste referencia a Garabandal, recuerdo que por entonces nada sabía de este pueblo y de lo sucedido allí. Así que un simple comentario tuyo, me sorprendió de algo tan «gordo» y a la vez tan sumamente desconocido.

    Enseguida encontré montones de videos y webs que daban todos los detalles. Sin embargo lo dejé ahí. Luego en este verano quise reservar unos días de vacaciones para ir allí. Una de las cosas que más me sorprendió, es que este lugar está anclado en el tiempo. No se han levantado hoteles para los pergrinos, y ademas son muchos menos los habitantes que en 1961.

    Después del verano, con tiempo quise hacer otro recorrido historico sobre Garabandal, pero sin posicionarme, para que lo «puedan» leer agnosticos y ateos (parecido al milagro del Sol).

    De hecho cuando leas esto, verás que lo enfoco todo partiendo de la duda (que es sana) aunque según se van mostrando la contundencia en los testigos y testimonios … pues eso.

    Espero que te guste:

    http://renovablessinlimites.blogspot.com.es/2013/11/pueden-los-ninos-mentir.html

    • Gracias por la deferencia Salvador, como el anterior artículo me parece una forma muy inteligente de abordar el tema, de hecho ese siempre fue el ejemplo de la Iglesia, actuar con la máxima prudencia ante estos fenómenos.

  9. Hola Alejandro.

    Por tercera vez he hecho una entrada de caracter religioso en mi blog. Y nuevamente lo he intentado escribir, para que sea lectura de interés en creyentes y en no creyentes.

    Me preocupa el futuro no ya por por el futuro Aviso de Garabandal, sino por tantas cosas que veo sin más. Creo que hay tres posibles catastrofes en ciernes, el colapso ambiental, la guerra, y el crash economico mundial. He trabajado durante meses para hablar de las dos primeras (si te interesa puedes buscar por la «La ignorancia es la felicidad» y la «La locura nuclear»). Creo que la económica será sin embargo la primera de todas.

    No obstante, también creo que las personas que tenemos fé, prodríamos llegar a soportar todo eso, pero nos dolería mucho más una futura crisis en la iglesia, que muchos ni imaginan. Creo que fue Jacinta la que dijo algo así como «cuando las cosas estén mucho peor, cuando no se pueda ni ir a misa, entonces vendrá el Aviso».

    Este post que te envío contrasta con la alegria de hoy (ya estaba hecho hace dos días), pero creo que es necesario advertir de la «muy posible» tormenta en los próximos días, aunque hoy haga un Sol estupendo.

    Prefiero ponerla aquí, en este «rinconcito», para que me expreses primero tu opinión.

    http://renovablessinlimites.blogspot.com.es/2014/03/confusion-total-lo-bueno-es-malo-y-lo.html

    Gracias.

    • Salvador, por supuesto que lo leeré y nuevamente te agradezco tu deferencia.


Categorías